Penélope Cruz, radiante de blanco en la alfombra roja de los Goya 2018

Han pasado 26 años desde que Penélope Cruz recibió su primera nominación a los Premios Goya por su trabajo en Jamón, Jamón, la película de 1992 que le dio su primer papel protagonista y le abrió camino en el cine español. Desde entonces ha acumulado diez nominaciones, tres de ellas con premio.

La última ha sido este año por su interpretación en Loving Pablo, la cinta de Fernando León de Aranoa en la que comparte pantalla de nuevo con Javier Bardem y que narra el romance entre la periodista Virginia Vallejo y el narcotraficante Pablo Escobar.

Este reconocimiento ha llevado a la actriz española hasta la alfombra roja del Madrid Marriot Auditorium Hotel, donde ha posado con un diseño de Atelier Versace. Cruz lució un vestido blanco con abertura lateral y hombreras pronunciadas con apliques metalizados.

Para completar su estilismo, la ganadora de un Oscar por Vicky Cristina Barcelona eligió unos pendientes largos con diamantes y esmeraldas. A diferencia del año pasado, la actriz optó por dejar suelta su larga melena, peinada con unas ondas laterales. En cuanto al maquillaje, la actriz madrileña optó por un look natural con ojos ahumados y labios en tono rosado.

Cruz aprovechó su paso por la alfombra roja para posar con el abanico rojo de la iniciativa #MásMujeres que pretende reivindicar más presencia femenina en la industria del cine. La actriz, que llegó sola a la gala, posó con su marido Javier Bardem y con su amiga Maribel Verdú.

La actriz ha estado de actualidad en los últimos meses por el estreno en Estados Unidos de la serie American Crime Story: el asesinato de Gianni Versace, en la que interpreta a la hermana del diseñador, Donatella Versace. Para verla en España habrá que esperar hasta el 21 de marzo, fecha para la que está previsto su estreno en Netflix.