Toda España, salvo Madrid, Barcelona y zonas de Castilla y León, pasa a la fase 1
Además, las islas de Formentera, El Hierro, La Gomera y La Graciosa pasan a la fase 2 a partir del próximo lunes.
Siete comunidades autónomas estaban a la espera del veredicto, y este viernes el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, lo han comunicado.
Prácticamente todo el país pasará a la fase 1 a partir del próximo lunes, salvo la Comunidad de Madrid, Barcelona y varias zonas sanitarias de Castilla y León, que permanecerán en la fase 0 previsiblemente una semana más. Los municipios que avanzan una fase más en la desescalada son los siguientes:
Por su parte, Formentera, El Hierro, La Gomera y La Graciosa pasan a la fase 2, después de llevar dos semanas en fase 1 al tratarse de islas con muy baja incidencia de la epidemia.
Con esta nueva distribución, un 30% de la población, 14 millones de ciudadanos, permanecerán en zona 0, aunque con algunas “mejoras” añadidas, ha señalado Illa. Es lo que se ha comenzado a llamar ‘fase 0,5’, una propuesta que hizo Barcelona al Ministerio de Sanidad para aliviar parcialmente las restricciones de la primera fase.
De este modo, a partir de la próxima semana, la fase 0 pasará a ser una especie de 0,5 ,y se permitirá la apertura de establecimientos comerciales con menos de 400 metros cuadrados sin cita previa para la atención individual de clientes; los lugares de culto religioso tendrán una limitación de un tercio del aforo, mientras que en los velatorios la limitación será de 10 personas. Además, en el ámbito del deporte profesional y federado se podrán realizar entrenamientos individuales, básicos y medios en centros de alto rendimiento que deberán aplicar medidas de protección e higiene reforzadas.
A estas medidas se suman otras vinculadas a la educación y universidades,
ciencia y actividades culturales, que se detallarán en la orden ministerial que
se publicará este sábado. Por el contrario, no están autorizadas las reuniones en domicilios, ni tampoco se abrirán las terrazas de los bares hasta que el territorio no entre a la segunda etapa de la desescalada.
Asimismo, en los territorios que pasen a fase 1 se permitirán la caza y la pesca, ha anunciado el ministro.
Fernando Simón ha destacado el “espectacular” progreso que ha mostrado la Comunidad de Madrid en el control de la epidemia, pero finalmente el Ministerio no ha podido aprobar que la capital pasara de fase, como pedía el Gobierno regional, por sus carencias en Atención Primaria y en la detección de casos por parte de los Servicios de Salud Pública.
Simón ha recalcado que los esfuerzos de la región en mejorar “la parte asistencial” han sido muy relevantes, pero ha reconocido que la Comunidad “partía de una situación más complicada”. En Madrid la epidemia tuvo un comienzo más “explosivo”, ha recordado, y el estudio de seroprevalencia ha mostrado además “que ha habido un porcentaje de casos no detectados”, y, por tanto, que esas personas pueden seguir contagiando. “Por muy rápido que haya sido el descenso, el número bruto de contagios sigue siendo mucho mayor que el del resto”, ha explicado Simón.
No obstante, el epidemiólogo ha avanzado que “en muy breve plazo” Madrid estará “en el mismo sitio que en el resto de comunidades autónomas”. “La idea inicial es que toda España esté en fase 1 la siguiente semana”, ha apuntado.
Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, llegó a acusar al Gobierno central de “agravio comparativo” al dejar a Madrid en fase 0. Pero la capital no es la única que tendrá que esperar.
Junto con Madrid, la zona sanitaria de Barcelona y todas las capitales de Castilla y León permanecerán en la fase 0 al menos durante una semana más. La diferencia es que los dirigentes catalanes y castellanoleoneses no habían solicitado avanzar en la desescalada, conscientes de que les faltaba por afinar algunos requisitos.
Por lo que han dado a entender Illa y Simón, hay muchas probablidades de que esta fase 0 sólo se alargue una semana más, si los datos siguen el ritmo que hasta ahora.
El ministro Illa ha apelado a la prudencia, a la cautela y a la responsabilidad civil de la gente, garantizando que el Gobierno dará “pasos seguros guiados por el conocimiento de la ciencia”.