Paco León: "La censura de Instagram viola los derechos de la libertad de expresión"
El actor y director ha presentado la segunda temporada de 'La Casa de las Flores', la serie de Netflix en la que interpreta a María José.
VITORIA.- Dice Paco León que es mucho más fácil dirigir que hacer reír, y La Casa de las Flores arranca muchas carcajadas, aunque su base sea el melodrama. El actor ha presentado junto a María León, Eduardo Rosa y el director Manolo Caro la segunda temporada de la serie en el FesTVal de Vitoria, al que Netflix ha acudido por primera vez.
Arde Madrid fue la última producción que dirigió. Aunque en un principio se anunció que tendría una segunda temporada, finalmente no llegará. “Fue un guion cocinado a fuego lento durante mucho tiempo. Ahora, de repente, hacer uno rápido porque ha sido un éxito y en un año hay que estrenar la segunda... Mira, no”, explica. Esta vez el sevillano no ha cogido las riendas como director. Para él “es un relajo muy grande actuar”. Le gusta que le dirijan y entregarse.
Le gusta tanto como desnudarse en Instagram. De hecho, lo hace muchas veces. Y “ojalá se desnude toda España”, dice. “Lo que me parece una reivindicación es que cada uno haga lo que quiera y que no te quiten una foto porque alguien lo denuncie. No hay nada malo en un cuerpo nunca, y menos si es bonito. Es absurdo e infantil que alguien se escandalice porque me quite la camiseta, que no estoy enseñando los huevos”, asegura en relación a su última foto censurada por Instagram. En la imagen frontal no llevaba ropa pero una mano estratégicamente colocada le cubre los genitales (en Twitter aún se pude ver).
León entiende que “si no permites algo con lo que no estás de acuerdo no defiendes la libertad de expresión”, y eso incluye “que C. Tangana tenga X letras o que alguien enseñe el culo. Es lo que hay que pagar por tener libertad de expresión y que alguien que se crea moralmente superior te diga lo que puedes o no puedes hacer es peligrosísimo”.
De La Casa de las Flores —que se estrena el 18 de octubre—, de desnudos, de libertad de expresión y de las polémicas que se han generado alguna vez en torno a su nombre ha hablado en esta entrevista con El HuffPost.
Parece que cada vez somos más elitistas y exigentes con las series y buscamos superproducciones, pero nos enganchamos a La casa de las flores que, a fin de cuentas, es una telenovela.
Porque es una telenovela 2.0., es una evolución, no es una telenovela tal y como la veíamos en los noventa. Hay una vuelta de tuerca y se tratan unos temas que no se habían tratado y que son bien actuales. Parte de eso y de algo que nos gusta a todos, el enredo y las tramas familiares y lo lleva a la actualidad. Toda la diversidad que aparece en la serie y sus temas son novedosos y no son habituales del género de la telenovela.
¿Se podría decir también que el público no ha cambiado tanto?
Habrá público para una telenovela convencional, pero no es el caso. Si emites ahora mismo La dama de rosa o Topacio no tendría el mismo seguimiento. Eso ha pasado y La casa de las flores es una evolución.
¿El sentido del humor mexicano y el español son parecidos, o te ha costado entrar en la historia de la serie?
Aquí lo que hay es el sentido del humor o el tono de Manolo. No sabes dónde va a surgir la comedia porque la base de esta serie es el melodrama. De repente hay salidas. La buena comedia, sobre todo compartiendo una cultura tan común, se entiende. De hecho esta serie ha sido un éxito sobre todo entre el público latino. Aída la han visto en toda Latinoamérica y se ríen también de los mismos chistes. El humor viaja bien.
En La casa de las flores te pones ropa y peluca y en Instagram te la quitas. ¿Estás obsesionado con el desnudo?
No, me hace gracia que sea tan notorio, porque no lo hago tanto. Me desnudo mucho menos de lo que me gustaría.
¿Podrías desnudarte más?
Ya sabes que sí.
¿Instagram tiene un doble rasero con la censura?
No, ha cambiado la política de Instagram hace dos meses. Tenía una norma muy de pezones femeninos, genitales y culos y ahora han cambiado a cualquier foto denunciada la quitan. Me parece injustísimo y me atrevería a decir inconstitucional, porque viola los derechos de la libertad de expresión.
¿Esto tiene algo que ver con la serie?
Sí, que la corrección política también está invadiendo un poco todo y es peligroso. La libertad de expresión hay que respetarla. Es difícil porque a veces hay cosas que tienes que aguantar que no te gustan, pero merece la pena porque ha costado mucho conseguirla. En la serie se habla de cosas políticamente incorrectas y merece la pena que se normalicen. Que me quite la camiseta en Instagram y se monte un escándalo, verdaderamente es muy ridículo.
Hablando de libertad de expresión... Cada vez nos ofendemos más por todo y que tú interpretaras a María José hirió algunas sensibilidades. ¿Te ha dado miedo asumir el papel?
Es una mujer que ha tenido un pasado en el que ha vivido como hombre mucho tiempo y la verdad es que ya estoy familiarizado con ese tipo de personajes o con sacar mi lado femenino. Lo que sí me daba un poco de pudor es representar a un colectivo tan ajeno como el colectivo transexual y con todas las críticas que hubo al principio tenía más responsabilidad y pensaba ‘tengo que representar...’. Pero el personaje y sacarlo de los estereotipos de marginalidad dignifica. María José es un pedazo de triunfadora, un personaje muy bonito que he hecho lo mejor que he podido, con todo el corazón y con toda la humanidad. Hay respeto, no solo a representar un papel, sino a todo un colectivo. Afortunadamente, después he recibido felicitaciones de gente que incluso lo había criticado al principio, que yo hiciera ese papel.
¿En tu familia tenéis todos ese temperamento artístico?
Todos no, creo que ni siquiera mi madre, ella comunica bien, pero el artista de mi familia es mi padre que justo no se ha dedicado a eso. Con una miga de pan te hacía un toro, una figurita, y a mí eso me fascinaba. Mi padre ha sido camarero y ha vendido jamón toda la vida, pero de repente se emociona con la música o con una película y hay un temperamento artístico de muchas generaciones que no se han dedicado a esto porque tenían que buscarse la comida. Hay muchos artistas en sus casas.