Pablo Iglesias ve un gesto de Robles junto a Montero, tuitea tres palabras y luego lo borra
Luego lo ha borrado.
Pablo Iglesias, exlíder de Podemos y exvicepresidente del Gobierno, ha tuiteado tres palabras al ver una imagen en la que aparece la ministra de Defensa, Margarita Robles, haciendo un gesto junto a la titular de Igualdad, Irene Montero, en las puertas del Congreso durante el acto institucional por el día de la Constitución.
“No me toques…”, ha tuiteado Iglesias (aunque posteriormente ha borrado el mensaje) junto a la imagen del acto, en el que la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha aprovechado para volver a apelar a la responsabilidad de sus señorías a quienes ha pedido que no utilicen la tribuna del hemiciclo para “zaherir” porque al hacerlo “defraudan la confianza” de la ciudadanía.
“El Parlamento es un lugar único y quienes formamos parte de él debemos ser conscientes de ello. Es el lugar en el que todos los ciudadanos están representados y en el que deben sentirse representados. La ciudadanía espera de sus representantes que la palabra se utilice para argumentar, no para herir; para proponer, no para ofender; para construir, no para zaherir”, ha dicho tras unas semanas en la que se ha incrementado la crispación en la Cámara.
Batet ha remarcado que está en manos de todos los miembros de la Cámara “no defraudar esa confianza”. A su juicio, las instituciones “pertenecen a los ciudadanos, que las confían en depósito a los responsables políticos para guardarlas y velar por su función”.
“Los deberes que impone esa relación de confianza nos exigen una conducta de máxima diligencia”, ha aseverado, antes de recordar que “la consolidación del sistema democrático es siempre una tarea inacabada que exige un esfuerzo constante y que desdeñar el ahora puede comprometer el mañana”.
Además, ha hecho hincapié en que la “política es una actividad esencialmente conciliadora. Se trata de emplear la palabra como instrumento de persuasión, de buscar los equilibrios razonables entre posiciones distintas. Y de escuchar, porque escuchar obliga a quien habla a hacerlo mejor”, ha sentenciado.