Entrevista a Celia Gallego: la artista que expone sus ojos en plena Gran Vía
Los ojos son el espejo del alma, la puerta al interior de las personas y la fuente de inspiración para Celia Gallego.
La artista de 23 años ha dedicado toda su vida al arte, desde 2015 ha expuesto en múltiples salas de Valladolid y de Madrid, y en sus redes sociales cuenta con más de veinte mil seguidores que día a día siguen y comparten su trabajo. Entre sus piezas más impactantes encontramos sus ojos sobre lienzo, el hilo conductor de toda su obra.
Lienzos redondos donde únicamente se puede observar un iris, que sumerge al espectador en una nube de colores y sombras, de tonos claros y oscuros, donde no se puede conocer la identidad del portador. Una artista definida prácticamente, por un estilo hiperrealista y obsesionada con la mirada de las personas, con descubrir qué colores se ocultan tras ellos, darles una oportunidad propia, un alma.
“Dos ejes fundamentales son los que definen mi obra: los retratos y las miradas. El conocer la anatomía de un cuerpo, ¿qué líneas conforman un pecho? ¿cuántas curvas necesito dar para realizar un desnudo femenino? Estudios de cuerpos desnudos, comprender cómo funciona la piel, las expresiones y, sobre todo, qué tienen estos retratos en su interior. Un rostro puede resultarnos impasible hasta que uno centra el ojo en la mirada. Aquí nace el segundo eje, las miradas muestran el mundo interior de una persona. Suelo recurrir a los ojos claros, transparentes, azules, ojos que muestran el mundo interior de cada personaje que nace en mis lienzos”, relata la artista.
¿Cuál ha sido tu inspiración para exponer tus ojos en plena Gran Vía?
Siempre he dibujado ojos, es una cosa que desde muy pequeña me ha fascinado y cuando llegó la oportunidad de poder exponer en el Edificio España un ojo tan grande, no había opción a un ‘no’.
Muchos de tus cuadros representan el cuerpo femenino, ¿qué opinas del desnudo femenino en el arte?
Hay una gran frase de Guerrilla Girls que dice: ”¿Acaso es que una mujer sólo puede entrar en un museo si es desnuda?”.
El cuerpo femenino se ha utilizado durante toda la historia del arte como objeto de deseo. Como objeto prácticamente inanimado, sin importancia, simplemente un objeto. Es hasta aburrido caminar por un museo y ver uno y otro, y otro desnudo femenino y todos prácticamente igual.
¿Qué técnicas utilizas?
Óleo sobre lienzo o sobre madera, es una técnica que me gusta muchísimo y, aunque a veces ponga acrílico para ayudarme en los procesos de secado, siempre será mi técnica favorita el óleo, es con la que más puedo sentir que represento algo.
¿Cómo fue exponer tus cuadros en plena Gran vía?
Está siendo algo precioso, todo el mundo lo puede ver. Todo aquel que pase por Gran Vía va a ver mi ojo gigante colgado del Edificio España, es un sueño para mí. Ojalá pudiera hablar con la Celia de 15 años y decirle que jamás tire la toalla, que cumpliría todo
Mucha gente se para, le hace una foto y se va, un trocito de mí se irá con ellos. Otras personas se acercan a ver quién es la artista, hablan sobre si les gusta o no y después se van. Es increíble.
¿Has encontrado tu sitio en el mundo del arte?
Aún creo que no, me queda mucho por aprender y explorar. No creo que haya llegado al punto de diferenciarme 100% del resto de artistas, aún siento que soy una aprendiz. Poco a poco iré encontrando mi camino pero no tengo nada de prisa, estoy disfrutando mucho el aprendizaje.
¿Cuáles son tus preocupaciones en este mundillo?
Es un mundo muy opaco, caminas dando palos de ciego y nunca sabes si vas en la buena dirección. Nadie te explica qué hacer o cómo hacerlo, tienes que ir a tientas buscando el camino y la suerte de dar con un marchante o galería que decida apostar por ti. A veces no depende del talento o del trabajo, sino de la suerte, y eso es muy frustrante.
¿Cuándo empezó tu pasión por el mundo del arte? ¿Hubo alguien que te motivó a adentrarte en él?
Mis padres dicen que prácticamente nací con un lápiz entre las manos, pinto desde que tengo uso de razón y, aunque todos los niños pinten, en algún momento lo acaban dejando pero yo no lo hice. ¡Y aquí estoy!
¿Cuándo surgió el impulso de dedicarte a ello de manera profesional?
Cuando me di cuenta de que la gente realmente se interesaba por mis piezas, mis láminas etc. En ese momento fui consciente de que realmente podría vivir de ello, pero con muchísimo sacrificio.
A pesar de que el arte sea tu gran pasión, estudiaste Periodismo. ¿Por qué tomaste esa decisión y qué te ha aportado la carrera a tu trabajo como artista?
Por miedo realmente, por miedo a hacer Bellas Artes y no ser lo suficientemente buena, por miedo a tener que ver mis dibujos y mis cuadros juzgados. Siempre me ha gustado investigar, escribir y hablar en público, por lo que decidí hacer periodismo y realmente no me arrepiento de nada. Adoro mi carrera y posiblemente no sería la misma si no la hubiera hecho.
¿Qué tratas de transmitir con tus lienzos?
Lo que te transmita a ti. Nunca busco algo concreto porque el proceso de creación lo hago mu subconscientemente, por lo que a veces ni yo misma sé qué he soltado entre los brochazos, lo descubro después.
¿Cómo definirías tu estilo?
Un popurrí de cosas realistas ¡por ahora!
Una entrevista de Marina Novotny publicada en White Paper By.