La ministra que acusó a Nadal de dopaje y un abogado de corruptos, en el nuevo Gobierno francés
Entre la lista de ministros de Macron se cuela algún nombre polémico.
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha vuelto a apostar por la derecha moderada para conformar su nuevo Gobierno, que ha sido anunciado este lunes y diseñado para afrontar la recuperación económica tras la crisis del coronavirus y para situarle en condiciones de reelección dentro de dos años.
Tres días después de haber elegido a Jean Castex, un excolaborador cercano de Nicolas Sarkozy, como nuevo primer ministro en sustitución de Édouard Philippe, Macron ha presentado un gabinete que va en la misma línea y que contará con varias figuras cercanas al expresidente conservador en puestos clave.
Entre ellas están Bruno Le Maire, que seguirá siendo el responsable de Economía, Gérald Darmanin, que cambia la cartera de Hacienda por la más mediática de Interior, y Roselyne Bachelot, que fue ministra de Salud y Deportes con Sarkozy y será la nueva titular de Cultura.
Roselyne Bachelot, condenada a indemnizar a Rafa Nadal
Precisamente el nombre de Bachelot resonó mucho en España hace unos años cuando acusó al tenista Rafael Nadal de doparse, motivo por el que fue condenada a indemnizarle en 2017.
En marzo de 2016, en un programa de televisión, Bachelot fue preguntada sobre el positivo de la rusa Maria Sharapova y acusó al mundo del tenis de no ser transparente en la lucha contra el dopaje, al tiempo que se mostró convencida de que Nadal se dopaba.
“No desvelan los controles positivos. Simplemente, nos enteramos curiosamente de que un jugador tiene una lesión que le mantiene meses alejado de las pistas. Sabemos más o menos que la famosa lesión de Rafael Nadal que le mantuvo siete meses sin competición (entre 2012 y 2013) fue seguramente debida a un control positivo”, dijo la ahora ministra de Cultura francesa. Esas palabras, que levantaron un gran escándalo en el país, le valieron una condena en el Tribunal Correccional un año más tarde.
Eric Dupond-Moretti, abogado de Julian Assange y de Mohamed VI
Y, sin embargo, el nuevo nombramiento que más ha sorprendido en Francia es el del nuevo ministro de Justicia, el polémico abogado Eric Dupond-Moretti, que también tiene lazos con Sarkozy, a quien en alguna ocasión ha considerado víctima de un linchamiento judicial.
Este letrado es muy conocido en Francia por haber defendido a políticos corruptos, al fundador de Wikileaks Julian Assange o al rey de Marruecos, Mohamed VI, al margen de participar con frecuencia en programas de televisión, donde es conocido por sus arrebatos de ira.
La primera reacción a su nombramiento fue instantánea y provino de la líder de la ultraderechista Agrupación Nacional (RN), Marine Le Pen, que escribió en Twitter: “En Justicia ha sido nombrado un militante de extrema izquierda que desea prohibir la RN, primer partido de la oposición. Esto promete...”.
El giro ecologista tendrá que esperar
Macron, que venía amagando con un giro social y ecologista a su política, sobre todo después de la victoria simbólica de los verdes en las municipales del pasado día 28, apuesta finalmente por una línea continuista.
El presidente no ha conseguido convencer a grandes figuras de la izquierda o del ecologismo de integrar su nuevo Ejecutivo. Se mantiene en Exteriores Jean-Yves Le Drian, varón socialista pero temprano ‘macronista’, mientras que Florence Parly, que también procede de las filas socialistas, sigue en Defensa pese a que sonaba para algún puesto de más calado.
El presidente mantiene también a fieles, como el responsable de Educación, Jean-Michel Blanquer; Elisabeth Borne, que cambia la cartera de Ecología por la de Trabajo; Julien Lecornu, que se ocupará de Ultramar; Jacqueline Gourault, que seguirá en Cohesión Territorial; u Olivier Véran, que mantiene Sanidad.
Julian Denormandie aterriza en Agricultura, Amélie de Montchalin en Función Pública y Marlène Schiappa abandona la cartera de Igualdad para convertirse en la número 2 del ministerio del Interior responsable de Ciudadanía.
El único guiño verde
Macron sí ha hecho un pequeño guiño a la ecología con el nombramiento de Barbara Pompilii como número 2 del Ejecutivo y responsable de Transición Ecológica.
Militante del partido verde, en 2016 entró en el Gobierno del socialista François Hollande y un año más tarde se pasó al partido de Macron, por el que es diputada.
Gérald Darmanin aparece como la figura emergente del nuevo Gobierno. Cercano a Sarkozy, de quien durante años se consideró su delfín, este político de 38 años, procedente de la política municipal, será el nuevo responsable de Interior, una promoción que le sitúa como una de las más claras apuestas del presidente.
En total hay ocho caras nuevas en un Gobierno formado por 30 ministros, 17 mujeres y 13 hombres, y que frente a los medios tendrá un portavoz con cargo de secretario de Estado, el joven ‘macronista’ Gabriel Attal.