Niño-Becerra advierte de qué es lo que hace falta para frenar la inflación: "Tiene efectos políticos"
El economista ha criticado las subidas de tipos de interés aplicadas por los bancos centrales.
El conocido economista Santiago Niño-Becerra ha hablado este sábado desde su cuenta oficial de Twitter sobre las medidas que hacen falta para frenar la inflación y ha advertido que podrían acarrear “efectos políticos”.
El experto que anticipó la crisis de 2008 ha criticado duramente a los bancos centrales por las subidas de tipo de interés, ya que cree que no es la solución para frenar el incremento de los precios.
“Siguen los avisos sobre nuevos aumentos de tipos de interés, cuando ESTA inflación, la que estamos padeciendo: una inflación de oferta, NO se arregla con aumentos de tipos, lo que pasa es que lo que habría que hacer para frenarla es más complejo y tiene ‘efectos políticos’”, ha señalado en un primer mensaje.
Niño-Becerra ha reconocido que el precio de la electricidad, el del MWh, “tiene que bajar” y cree que “modificar el sistema de cálculo de su precio ayudaría muchísimo”.
“El precio del petróleo tiene que bajar, y constituir centrales internacionales de compra del mismo modo que existen cárteles de venta también ayudaría”, ha proseguido.
El conocido economista cree que también tiene que descender “el consumo de ciertos bienes” y ve “fundamental” instaurar “impuestos progresivos sobre el lujo en función del valor”. “Tendría que analizarse con lupa la eficiencia de cada céntimo de gasto público a TODOS los niveles”, ha advertido.
Niño-Becerra ha asegurado que también se debería ayudar “a las personas y a los colectivos vulnerables” y tilda como “absurda” la “rebaja tipo café-para-todos de los 20 cts. en el precio del litro de combustible o en el IVA de la electricidad”.
“Lo que no tiene efectos inmediatos, que es lo necesario, es aumentar los tipos de interés”, ha reiterado en redes sociales.
El experto que adelantó la crisis de 2008 defiende que con las subidas de tipos, a largo plazo los precios “bajarán”, porque la economía “se irá deteniendo” y cree que lo hará “a costa de dramas sin cuento evitables y de aumentos de gasto público que harán crecer la deuda”. “Luego habría que reducir a costa de más dramas”. “MAL. MUY MAL”, ha sentenciado.