Netanyahu y Gantz sin mayorías en un lento recuento de votos en Israel
Sigue la tendencia de las encuestas a pie de urna: sin ganador claro ni mayoría de bloques parlamentarios.
Con un 91% del voto escrutado a última hora de la noche del miércoles en Israel, un día después de las elecciones, sigue la tendencia de las encuestas a pie de urna: sin ganador claro ni mayoría de bloques parlamentarios.
A falta del escrutinio definitivo, el derechista Likud de Benjamín Netanayahu y la coalición centrista-derechista de Azul y Blanco de Beni Gantz se mueven en el ‘empate técnico’, con igualdad de escaños, 32 y un pequeño margen de votos favorable a Gantz.
Le siguen con alrededor de más del 8% los dos partidos ultraortodoxos, Shas y Judaísmo Unido por la Torá; y no muy lejos quedaría el ultraderechista laico, Israel Nuestro Hogar, de Avigdor Lieberman, a quien todos señalan como la próxima llave de Gobierno.
Este repitió anoche que para él la ”única opción” será un Gobierno de Unidad nacional entre el Likud y Azul y Blanco, propuesta que respalda el exjefe del Estado Mayor Ganzt.
Sin embargo, Netanyahu no hizo referencia a Gantz en su intervención de madrugada, pero dejó claro que “no puede haber un gobierno que dependa de los árabes”, representada por la Lista Unida, a quien los sondeos a pie de urna le dan más de diez diputados, como tercera fuerza parlamentaria.
“Muy pronto, mi buen amigo el presidente (Donald) Trump presentará su plan (de paz), y este diseñará el futuro de Israel por muchas generaciones” y por eso “Israel necesita un gobierno estable y fuerte, un gobierno sionista y comprometido con Israel como el estado nacional del pueblo judío”, señaló el primer ministro en funciones.
Con un todavía bajo porcentaje de escrutinio, la Lista Unida no superaría el umbral del 3,25% para entrar en el Parlamento israelí (Knéset).
La alianza de partidos de ultraderecha, Yamina, seguiría a la lista de Lieberman, y como formaciones menos votadas quedarían las de centro izquierda: el Laborismo-Gesher y la Unión Democrática.
Más de 6,3 millones de israelíes estaban llamados a votar este martes en las segundas elecciones que celebra el país en menos de seis meses y que alcanzó un 1,5% más de participación que en las de abril, con un 69,4%.
A falta de los resultados definitivos, los analistas señalan un bloqueo político si se confirman los sondeos de pie de urna y ven como única posibilidad un gobierno de unidad en Israel.