Nadal se sincera sobre su comentada foto y acaba confesando lo que pasó después
"Se me fue un poquito de las manos".
Rafa Nadal y Roger Federer dejaron una de las imágenes del año en el mundo del deporte al estar sentados, agarrados de la mano y llorando después de jugar el último partido juntos en la Laver Cup, que se acabó llevando el equipo del Resto del mundo.
La instantánea se produjo después de que ambos tenistas perdieran su partido de dobles, el último en la carrera de Roger Federer. Cuando empezó su homenaje de despedida, todo el mundo en las gradas y en la pista se emocionaron quedando al borde las lágrimas.
Sin embargo, ni Federer ni Nadal pudieron aguantarlas y la foto que dejaron ha dado la vuelta al mundo.
Este domingo, Rafa Nadal estuvo en El Partidazo de la Cadena Cope y fue preguntado por esa imagen. El manacorí, que confesó que aún no ha visto la foto porque usa poco las redes sociales, habló sobre ese momento.
“Soy una persona sensible, y cuando ves a alguien al que aprecias es difícil no emocionarse, aunque se me fue un poquito de las manos. Fue un momento difícil de gestionar”, aseguró.
Además, Nadal también confesó que después del partido y de la ceremonia, cuando volvió al hotel, volvió a emocionarse: “Cuando llegué a mi habitación, me volví a emocionar. Pero por lo que significaba el momento y por lo que se vivió en aquella noche, fue difícil no hacerlo”.
En la entrevista, el deportista balear señaló que no se vio reflejado por el momento en el que llegue su retirada. “Nada, cero”, llegó a decir Nadal, que reconoció que no ahora no se plantea cuándo será su final su final.
“Mi emoción no era culpa de eso, sino por el aprecio y la admiración que siento hacia Federer”, concluyó.