El Prado investiga el origen de 62 obras incautadas en el franquismo y la Guerra Civil
25 provenían de la Comisaría General del Patrimonio Artístico Nacional.
El Museo del Prado investiga la procedencia original de 62 obras de arte que conserva en sus fondos, probablemente incautadas durante la Guerra Civil y el franquismo, de las que 25 provenían de la Comisaría General del Patrimonio Artístico Nacional, creada en 1939.
El pasado día 20, el Prado publicó un listado con estas 25 obras de su colección y anunció que abriría una investigación para averiguar si existen más piezas en la misma situación y, llegado el caso, “y cumpliendo todos los requisitos legales, proceder a su devolución a sus legítimos dueños”.
Por ahora son 62 las detectadas y el Prado no espera que se localicen más, según han señalado a Efe fuentes de la Pinacoteca, que han precisado que no les consta que haya habido ninguna reclamación sobre alguna de estas obras.
De 22 de ellas ya constaba su origen de manera expresa en la ficha publica de la web del museo, mientras que las tres piezas restantes no tenía ficha por su mal estado de conservación. Lo que ha hecho ahora el museo es agrupar toda la información disponible en un documento accesible también en la web.
La investigación abierta por el Prado, y que dirigirá el catedrático y especialista en esta temática Arturo Colorado, tiene como objetivo aclarar cualquier duda que pudiera existir sobre los antecedentes y el contexto previos a que se produjera su entrada en las colecciones del Prado.
Y el museo aplicará la ley si hay alguna injusticia que se pueda restituir, después de que se hayan presentado las reclamaciones correspondientes y haya una decisión judicial, han explicado las mismas fuentes.
En concreto, el Museo del Prado conserva 62 obras relacionadas con la Comisaría General del Patrimonio Artístico Nacional (creada en 1939) o con la Junta de Incautación y Protección del Patrimonio Artístico (nacida en 1936).
De estas, tiene adscritas a sus colecciones 25 obras (23 pinturas, 1 frutero y reloj) que proceden de la Comisaría General del Patrimonio Artístico Nacional que, a su vez, debían proceder de las incautadas para su salvaguarda por la Junta de Incautación y Protección del Patrimonio Artístico durante la Guerra Civil , ha explicado el museo.
Además, tiene 11 pinturas (depositadas entre 1936 y 1939) por la Junta Delegada de Incautación del Tesoro Artístico y otras 26 pinturas, en general muy deterioradas, depositadas en fechas desconocida por esa misma junta.
Algunas obras cuentan con algún dato alusivo a la procedencia anterior a su incautación, aunque en la mayoría de los casos se desconoce quién era el propietario individual, bien por falta de información de los propios herederos o por el exilio de las familias, entre otras circunstancias.
De las 25, 17 son pinturas que fueron entregadas al Museo del Prado por la Comisaría General del Patrimonio Artístico Nacional entre 1940 y 1942 mientras que 5 llegaron al Museo de Arte Moderno, procedentes de la Comisaría General del Patrimonio Artístico Nacional (1942), que formaron parte de las colecciones del Museo Español de Arte Contemporáneo (1968-1971).
También aparece una que fue entregada al Museo de Arte Moderno, procedente de la Comisaría General del Patrimonio Artístico Nacional (1943), pero que quedó en el Museo de Arte Contemporáneo y pasó al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, desde donde se adscribió al Museo del Prado en 2016 por reordenación de colecciones. Y hay además un frutero y un reloj procedentes de la Comisaría General en 1972.
El museo recuerda que toda la información sobre la procedencia de 25 de estas obras está igualmente accesible para todos los ciudadanos a través del canal Colección de la página web del Museo del Prado.
Y explica que desde 2017, los historiadores e interesados en el devenir de las obras de arte durante la Guerra Civil Española y la Dictadura o los posibles afectados por las incautaciones y devoluciones de obras de arte durante este periodo, pueden acceder a los contenidos conservados sobre este tema en la colección La Guerra Civil del Archivo Digital, que contiene 286 expedientes.
El ministro de Cultura, Miquel Iceta, ha pedido además a todos los museos nacionales que realicen una labor similar a la del Prado para que “todas las obras de las que disponen las entidades y organismos oficiales del Estado tengan acreditado el origen” para que, si se hubiera producido una incautación injusta, abrirse un procedimiento de devolución”.
El Gobierno decidió recientemente devolver a la familia del naviero Ramón de la Sota dos obras requisadas por el régimen franquista, después de que uno de sus herederos los identificara en el Parador de Almagro (Ciudad Real).