Murcia, otra vez en el centro de la polémica: la última, por la figura de Juan de la Cierva
El inventor, aviador e ingeniero ha sido la excusa para otro enfrentamiento entre el Gobierno nacional y el regional.
Otra polémica con Murcia en el foco. El Gobierno regional ha tachado de “decisión estrictamente ideológica” que el Gobierno nacional haya rechazado ponerle el nombre del inventor murciano Juan de la Cierva al Aeropuerto Internacional de la Región, como ha defendido el líder murciano, Fernando López Miras.
El consejero de Fomento e Infraestructuras, José Ramón Díez de Revenga, ha acusado directamente a Pedro Sánchez, de “reescribir la historia desde un enfoque sectario y con una interpretación sesgada de este ilustre murciano, desoyendo al sentir de una región y sin tener en cuenta sus innumerables méritos cosechados durante su trayectoria profesional y contribución a la aviación en el mundo”.
Los motivos que podrían estar detrás de esta decisión, que la oposición achaca a la Ley de Memoria Histórica, no tienen que ver con sus méritos en el sector de la aviación. El científico aeronáutico, ingeniero y aviador inventó el autogiro, una aeronave con sus alas fijadas al rotor y precursora del actual helicóptero en los primeros años del siglo XX, poco después del nacimiento del avión.
El éxito de Juan de la Cierva supuso todo un hito para su tierra natal. La idea del aeropuerto dedicado a él viene de lejos. En septiembre del año 1930, la Diputación Provincial y el Ayuntamiento de Murcia anunciaron el acuerdo de adquirir los terrenos precisos para la construcción de un aeropuerto que llevaría su nombre.
Su legado en España
Pero va más allá de Murcia. De la Cierva es uno de los inventores más recordados de la historia de España, hasta el punto que desde 2001 el entonces llamado Ministerio de Educación otorga un premio nacional con su nombre, así como da nombre a un programa de formación de investigadores.
La figura de De la Cierva también aparece en calles en varias ciudades de Madrid (como Getafe y Arganda del Rey), de Barcelona (Mataró, entre otros) o en A Coruña. Igualmente, ha ‘bautizado’ colegios en la capital, Getafe, Málaga y varios puntos de la región murciana.
Las sombras de su figura
Sin embargo, su figura quedó posicionada a favor del bando sublevado al comienzo de la Guerra Civil, a pesar de que él vivía en Londres por entonces. De la Cierva ayudó al bando franquista para que consiguiera el Dragon Rapide, el avión en el que el propio Franco voló desde Canarias a Tetuán para tomar el mando del ejército en las posiciones españolas del norte de África.
Fue su única aportación conocida para la causa contra el Gobierno de la República. Apenas unos meses más tarde, en diciembre de 1936, el gran aviador e inventor moría a los 41 años, ironías de la vida, en un accidente aéreo en el despegue de un vuelo que tenía destino Amsterdam.