La Policía de México, investigada por la muerte de una salvadoreña sometida como George Floyd
Victoria Salazar, de 36 años, fue detenida en plena calle, una agente le clavó la rodilla en la espalda y al poco dejó de respirar.
Se llamaba Victoria Salazar Arriaza y tenía 36 años. Ahora está muerta. Fue supuestamente sometida por los agentes, con la rodilla contra su espalda, hasta que dejó de respirar. Un caso que recuerda mucho al del afroamericano George Floyd, cuyo asesinato se juzga estos días en EEUU.
Este supuesto caso de brutalidad policial con resultado de muerte está generando una enorme indignación dentro y fuera de México. La fiscalía del estado de Quintana Roo ha abierto una investigación por homicidio tras el fallecimiento de esta inmigrantes, tras ser detenida por la policía en las calles de Tulum, un popular centro de vacaciones en el Caribe mexicano.
Tras el fallecimiento de la mujer, en la tarde del sábado, un vídeo que supuestamente muestra el incidente empezó a circular por las redes sociales y fue publicado por medios mexicanos. En él se ve a la víctima forzada a permanecer boca abajo contra el suelo, esposada, mientras que una mujer policía apoya la rodilla contra su espalda, bajo la mirada de otros tres uniformados que no hacen nada por ayudar a la víctima.
Como en el caso de Floyd, se oye también cómo la mujer se queja y en un momento dado deja de moverse. Posteriormente, los agentes mueven el cuerpo, que no lleva zapatos, a la parte posterior de una camioneta policial.
La Fiscalía General de Quintana Roo anunció en un comunicado que va a ejercer la acción penal contra los cuatro policías “por su probable participación en hechos señalados por la ley como feminicidio”.
Sobre ellos se ordenó su ingreso en un centro de detención y serán puestos después a disposición de un juez de control, anunció el organismo, que afirmó también que “se aplicará todo el rigor de la ley para que el delito no quede impune y procurar la justicia”.
Según el servicio médico forense de la fiscalía, la necropsia concluyó que la causa de la muerte fue una fractura y lesiones en la parte superior de la columna vertebral que “son compatibles y coinciden con las maniobras de sometimiento que se le aplicaron a la víctima durante el proceso de su detención y antes de fallecer”.
“La técnica policial de control corporal aplicada y el nivel de fuerza utilizado se realizó de manera desproporcionada, inmoderada y con un alto riesgo para la vida, ya que no fue acorde con la resistencia de la víctima lo que ocasionó una desaceleración”, aseguró la fiscalía.
Además de los cuatro agentes, también el director de policía de Tulum, Nesguer Vicencio Méndez, fue apartado de su cargo.
El Instituto Nacional de Migración mexicano informó que la mujer de origen salvadoreño tenía residencia permanente en México como refugiada por razones humanitarias.
El presidente Andrés Manuel López Obrador denunció que la mujer “fue brutalmente tratada y asesinada”.
“Es un hecho que nos llena de pena, de dolor y de vergüenza. Decir a sus familiares, a las mujeres salvadoreñas, mexicanas, las mujeres del mundo, a todos, hombres y mujeres, que se va a castigar a los responsables. Ya están en proceso de ser enjuiciados y no habrá impunidad”, aseguró este lunes.
En El Salvador, el caso ha generado también una fuerte reacción por parte de representantes del gobierno.
El presidente, Nayib Bukele, pidió “que a los que hicieron esto les caiga todo el peso de la ley” desde su cuenta de Twitter, mientras que la canciller salvadoreña, Alexandra Hill Tinoco, calificó los hechos de “asesinato”.
“A la familia de la víctima reiteramos el total apoyo y acompañamiento del gobierno del presidente @nayibbukele. Nuestras oraciones están con los seres queridos de nuestra compatriota”, tuiteó.
René Olivares Arriaza, medio hermano de la fallecida, confirmó por teléfono a la agencia Reuters haber visto el video y explicó que la víctima llevaba unos tres años en México. La salvadoreña, originaria de Sonsonate, deja dos hijas adolescentes.
El incidente ha provocado una oleada de protestas en redes, mientras que en Tulum un grupo de personas se manifestó el domingo frente a la Dirección Municipal de Seguridad Pública y Tránsito.
“En México, donde ser mujer es vivir en peligro permanente”, dijo la escritora y activista Denise Dresser a través de Twitter, donde se popularizaron las etiquetas #JusticiaParaVictoria y #NoMurioLaMataron.
La Red Feminista Quintanarroense consideró que los hechos son resultado de la “nula capacitación y garantía de los Derechos Humanos, y la inexistencia de protocolos de detención” con perspectiva de género, según el periódico El Universal.
No es la primera vez que policías locales del estado de Quintana Roo son cuestionadas por sus funciones.
En noviembre, el director de Seguridad Pública de Cancún y el de Quintana Roo fueron separados de sus respectivos cargos después de que una manifestación contra los feminicidios organizada en esta otra ciudad del Caribe mexicano fuera disuelta a disparos por la policía.