Muere Ignacio Echeverría, el héroe del monopatín
Acaban varios días de angustia para la familia del español desaparecido tras los atentados de Londres.
"El héroe del monopatín". Así ha estado llamando estos días la prensa inglesa a Ignacio Echeverría.
Y no les ha faltado razón. El madrileño, de 39 años y nacido en Galicia, pagó con su vida salir en defensa de una mujer que estaba siendo atacada por los terroristas que el pasado sábado cometieron un doble atentado en Londres con ocho víctimas mortales.
Uno de los amigos de Ignacio, presente en esos minutos de pánico, contó a Mediaset cómo vivió ese momento: "Parecía que había una pelea unos metros para adelante, como 15 o 20 metros, parecía una pelea... De repente te fijas y ves que un tío estaba pegando a una chica, pero ensañándose. De repente, la próxima cosa que recuerdo es Ignacio ya allí, como en la pelea, dándoles patinazos a todos los tíos que estaban allí; los terroristas. Un patinete contra un cuchillo y tres tíos o cuatro tíos que te van a matar. Tienes que tener mucho valor".
Ignacio iba con un monopatín porque hacer skate era una de sus aficiones. Practicando ese deporte aparece en una de las fotos que colgó su hermano Joaquín en su Facebook cuando pedía ayuda para encontrarlo.
Según cuenta La Voz de Galicia, Ignacio vivía en Londres desde febrero de 2016, cuando se marchó allí para trabajar en el banco HSBC. Era el tercero de cinco hermanos - Joaquín, Enrique, Ignacio, Ana e Isabel- y nació en Ferrol porque su padre, ingeniero de Endesa, trabajó durante varios años en la central térmica de As Pontes. Cuando Ignacio tenía 9 años, la familia se trasladó a Las Rozas, un municipio acomodado a las afueras de Madrid. Su ayuntamiento ha decretado dos días de luto oficial y ha anunciado que creará una medalla de la ciudad con el nombre de Ignacio Echeverría.
Desde el día del atentado, el sábado por la noche, hasta la tarde del miércoles en la que se ha confirmado la muerte de Echevarría han pasado cuatro días que han desesperado a su familia y a las autoridades españolas. Ninguna instancia británica daba ningún dato sobre su paradero. Nadie confirmaba ni desmentía si Ignacio estaba entre los heridos o entre los fallecidos. La policía llegó a pedir "más tiempo" a la familia cuando ya habían pasado tres días desde el atentado.
"Podemos entender que haya que respetar ciertos protocolos pero hay que tener en cuenta la situación de la familia, que no está muy lejos de ser inhumana", se ha quejado desde Moscú el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis. También de "inhumana y desesperante" la ha tachado el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido.
En una entrevista en Onda Cero, la portavoz de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, Dolores Delgado, ha recordado que, tras un atentado, un pilar fundamental de la actuación es el cuidado de las víctimas.
Los padres y dos de sus hermanos volaron el martes a Londres para reunirse con sus dos hermanas, una de ellas residente en la ciudad. Sin embargo, no les permitieron ver el cuerpo.
Aunque no es un paso definitivo para la identificación, según el protocolo de la policía británica, al menos hubiera podido poner fin a las dudas sobre el paradero de Ignacio. La espera se va a demorar hasta el viernes, según su hermana Ana.
Desde que se ha conocido la noticia del fallecimiento de Ignacio, a primera hora de la tarde del miércoles, se han sucedido las muestras de cariño de autoridades y ciudadanos anónimos. Valentía y dignidad son dos de las palabras más repetidas.