Muere el diseñador Pierre Cardin a los 98 años

El diseñador Pierre Cardin ha muerto este martes a los 98 años en París, según ha informado su familia y la Academia de Bellas Artes. Nacido en un pequeño pueblo de la región italiana del Véneto como Pietro Cardin, se trasladó a París en 1945, donde estudió arquitectura y se labró una influyente carrera en el mundo de la moda.

Cardin, que aprendió en el taller de Elsa Schiaparelli y dio sus primeros pasos en Dior, fue uno de los pioneros del prêt-à-porter. Famoso por sus diseños escultóricos y futurísticos, fundó su firma de moda en 1950, después de ser rechazado por Balenciaga y en 1953 se estrenó en la alta costura.

Cuando en 1959 lanzó el prêt-à-porter y la moda accesible recibió infinidad de críticas de compañeros del sector, como Pierre Bergé, cerebro económico detrás de Yves Saint Laurent, que fue precisamente quién popularizó esta manera de vestir. Con su colección para los grandes almacenes Printemps hizo que lo expulsarán de la Chambre Syndicale, el órgano que regula las casas de costura francesas, pero fue readmitido a los pocos meses.

Cardin apostó por el prêt-à-porter como respuesta a una sociedad en cambio tras la Segunda Guerra Mundial y a un buen número de mujeres que no podían permitirse prendas de alta costura.

Junto con Paco Rabanne y André Courrèges recibió el título de “creador futurista” y su visión empresarial hizo que su marca se convirtiera en un imperio que a día de hoy sigue gozando de gran éxito. Cardin fue un revolucionario no sólo a la hora de trabajar con diferentes tejidos o presentar nuevas siluetas, cambió el modelo de negocio al ampliar su línea más allá de la ropa. A través de las licencias lanzó todo tipo de accesorios y calzado, un recurso que permite a las marcas facturar grandes cantidades.

Cardin organizó desfiles en la Plaza Roja de Moscú y en la Gran Muralla China, y fue el primer diseñador en ocupar la portada de la revista Time. Su influencia fue más allá de la moda y trabajó con grandes cineastas como Jean Cocteau o Roger Vadim. Diseñó muebles, trabajó en el teatro y gestionó durante varios años el célebre restaurante parisino Maxim’s.

Su influencia y popularidad hicieron que vistiera a grandes iconos de la época como Brigitte Bardot, Lauren Bacall o Jeanne Moureau. La actriz parisina fue su gran musa y su pareja durante cuatro años y aunque el romance terminó de forma abrupta pero él siempre la consideró su gran amor. De hecho, en un documental en el que se hace repaso de su vida cuenta que uno de sus grandes arrepentimientos es no haber tenido un hijo con ella.

El diseñador celebró sus setenta años de carrera el pasado mes de septiembre con un desfile especial en el Teatro del Châtelet de París.