Montar una empresa de forma inteligente
Este tema daría para un libro entero de la colección, con sus correspondientes 88 Peldaños, pero dado que no tenemos ese espacio, incluiré sólo algunas de las claves más importantes de lo que he aprendido sobre cómo poner en marcha una empresa de éxito en un solo Peldaño. Sólo ten presente que te estoy contando tan sólo la punta y no el iceberg entero. La idea no es darte una guía paso a paso, sino que te familiarices con algunas de las realidades de poner en funcionamiento un negocio.
El primer escollo que deberás superar para poder lanzarte a emprender viene en forma de consejo. Este es el más importante que puedo darte sobre montar un negocio:
#LaInteligenciadelÉxito
No inviertas ningún dinero que no te puedas permitir que se pierda y no emprendas ningún negocio que no te puedas permitir que fracase.
@Anxo
Hay dos tipos de emprendedores: el intuitivo y el empírico. Averigua cuál de los dos eres tú. Si eres intuitivo, te guías por las sensaciones que tú tienes de qué podría funcionar y qué no. Si eres empírico, esa decisión no te la da tu instinto, sino los datos: tendencias del mercado, mediciones por internet, analíticas, gráficos o estudios de mercado. Se puede tener éxito con ambos métodos. Lo importante es que seas consciente de los dos tipos para que puedas ser fiel al que mejor encaja contigo. Mi consejo es que escuches a tu intuición pero que no ignores los datos.
Una vez tengas tu idea, querrás contársela a toda la gente de tu entorno y sobre todo querrás saber su opinión. Yo soy más partidario de hacer que de contar, pero dado que tu cuerpo te pedirá buscar la opinión de otros, no te digo que no lo hagas. Hazlo, pero si, y sólo si, consigues relativizar sus respuestas.
Si estás pidiendo la opinión de alguien que sabe poco de un tema, no cometas luego el error de darle el mismo valor que el de alguien que es experto. Tus familiares, para bien o para mal, son supuestos expertos en detectar peligros, pero no en identificar oportunidades.
Tu objetivo, una vez tengas clara la idea, es contar lo más rápido posible con el modelo mínimo viable, esto es, un producto desarrollado a mínimos, a fin de conseguir que haya costado el menor dinero posible, pero que aun así sea apto para ser vendido. Tener un producto vendible habiendo gastado lo mínimo tiene un número de ventajas muy alto y es algo de una importancia colosal. Te permite saber si tu producto va a funcionar o no arriesgando lo mínimo posible en crearlo, y esto es una ventaja porque te da la opción de realizar ajustes rápido, ya que puedes averiguar en el menor tiempo qué no gusta a tus clientes y cómo cambiarlo.
#LaInteligenciadelÉxito
Si quieres llegar lejos, falla rápido.
@Anxo
Cuanto antes falles, antes sabrás qué mejorar, puesto que podrás entender PRONTO cuáles son las necesidades del mercado. Y lo que es más importante, te obliga a centrarte en el tronco del árbol en lugar de en las ramas. Si decides montar una heladería en la esquina de tu barrio, la ubicación, la calidad del helado o los precios representan el tronco. El color de las paredes, el tipo de mobiliario, o el tipo de iluminación son ramas.
Centrarte en el modelo mínimo viable es centrarte en averiguar en el menor tiempo si el que da resultado es el tronco que sostiene al árbol. Una vez tengas tu producto acabado, te darás cuenta de que lo más difícil no es tener un producto, sino conseguir que lo conozcan. Si tu idea principal para darte a conocer es contárselo a todos tus amigos y anunciarlo en todas tus redes sociales, ese plan es perfecto... para un proyecto de colegio.
El control tiene que estar en tu tejado, y eso requiere de un plan de marketing. Lo bueno es que internet ha revolucionado y simplificado el marketing, incluso para negocios offline. Para ello tienes dos opciones. O remangarte y empaparte de toda la información que existe en internet sobre el marketing online (y offline), o contratar a un experto. Lo primero parece un océano, pero no lo es. Si estudias por tu cuenta veinte horas enteras sobre ese tema, sabrás más que el 99% de la población mundial en ese campo. Dicho eso, yo te recomiendo contratar una agencia de marketing y publicidad. Hay miles de opciones publicitarias para darte a conocer y muchas son más asequibles de lo que crees.
Por fin llegamos a la fórmula de comercialización. Aquí la práctica no es fácil, pero la teoría sí. Si inviertes 100 y obtienes 99, ese modelo a la larga te llevaría a la ruina. Si inviertes 100 y obtienes 101, ese modelo a la larga te haría millonario. Por tanto, el objetivo es conseguir que lo que inviertes en captar clientes sea siempre menos que lo que obtienes a cambio. Esa cuenta no es nada fácil y requiere tiempo, mediciones, análisis y ajustes, pero no te obsesiones con ello al principio, ya que es una capacidad que se va mejorando con la práctica.
Si estás arrancando un negocio de cero y sin grandes cantidades de dinero, como ha sido mi caso con 8Belts, entiende que al principio tú tendrás que hacerlo absolutamente todo, desde responder a los teléfonos a vender puerta a puerta si hace falta, pasando por redactar emails, emitir facturas o realizar cobros. Tu objetivo será ir contratando personas que se vayan especializando en cada área hasta que puedan hacerlo mejor que tú. En la medida en que empieces a incluir a otros, tú empezarás a tener más vida, y tu negocio, más crecimiento.
Mi último consejo es: haz lo indecible para reducir gastos. Sé todo lo conservador que puedas ser por muy bien que te vaya, ya que lo que acaba tumbando a una empresa son los costes. Una empresa sólo cierra cuando no puede afrontar sus deudas. Controla el gasto y controlarás el oxígeno que mantiene viva la empresa.
Al principio dije que este Peldaño es sólo la punta. El resto del iceberg se obtiene arriesgando mucho, probando siempre, fallando bastante y acertando a veces.
Yo te animo a que emprendas. Aunque el éxito no está garantizado nunca, el aprendizaje lo está siempre.