Merkel califica de “imperdonable” la elección del presidente de Turingia con votos de la ultraderecha
La canciller alemana pide que el resultado sea "revertido".
La canciller alemana, Angela Merkel, ha calificado de “imperdonable” la elección el pasado miércoles del liberal Thomas Kemmerich como primer ministro del estado federado de Turingia con los votos de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) y ha llamado a revertir este resultado.
En una rueda de prensa conjunta en Pretoria con el presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, difundida por las televisiones alemanas, Merkel, ha afirmado que lo ocurrido el miércoles ha sido un “procedimiento excepcional” que ha roto con la “profunda convicción” tanto suya como de su partido de que “no se deben ganar mayorías con el apoyo de la AfD”.
Así, ha criticado que “en la constelación en la que se votó ayer en la tercera vuelta” el desenlace “era previsible”, lo cual convierte el procedimiento en “imperdonable” y “por ello el resultado debe ser revertido”.
Ha afirmado también que al menos en lo que respecta a su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU) “no debe participar en un gobierno bajo el primer ministro electo”, el liberal Kemmerich.
“Fue un mal día para la democracia, fue un día que rompió con los valores y convicciones de la CDU y ahora debe hacerse todo lo posible para dejar claro que esto en ningún modo puede ser conciliable con lo que piensa y hace la CDU. En esto habrá que trabajar en los próximos días”, ha zanjado.
La líder de la CDU, Annegret Kramp-Karrenbauer, declaró el miércoles por su parte que el grupo parlamentario regional había votado “expresamente en contra de las recomendaciones, exigencias y demandas” de la formación a nivel federal.
En su opinión, es necesario hablar acerca de si “unas nuevas elecciones no son la salida más limpia a esta situación”.
Kemmerich fue elegido en tercera vuelta con 45 votos frente a los 44 obtenidos por el hasta ahora primer ministro Bodo Ramelow, de la Izquierda, y después de que la CDU se hubiera abstenido en las dos primeras rondas.
El presidente de la CDU en Turingia, Mike Möhring, justificó el voto de la mayoría de su grupo parlamentario argumentando que no podían negarse a apoyar a un candidato de centro.
En las dos primeras votaciones se habían presentado sólo Ramelow y el independiente Christoph Kindervater, que se presentaba con el apoyo de la AfD.
“En las dos primeras vueltas nos abstuvimos, en la tercera había un candidato de centro y no podíamos abstenernos. Sin embargo, no somos responsables de las candidaturas de otros partidos ni de la forma como votan”, se ha justificado.
Este sábado, la gran coalición de gobierno entre los conservadores de Merkel y socialdemócratas celebrarán una reunión de crisis para abordar las consecuencias de lo ocurrido en Turingia.