Mercedes Milá sorprende con estas declaraciones sobre Miguel Bosé
La presentadora ha vuelto hablar de las palabras del cantante en 'Lo de Évole'.
Mercedes Milá es conocida por no tener pelos en la lengua. La presentadora no tuvo reparos en mandar un mensaje a su amigo negacionista Miguel Bosé tras vacunarse, y este martes ha vuelto a ser rotunda sobre la entrevista del cantante con Jordi Évole.
En un vídeo publicado este jueves por la revista Lecturas, Milá no solo ha vuelto a mostrar su desacuerdo con Bosé por su postura ante las vacunas y el coronavirus, también se ha mojado sobre las adicciones del artista.
Bosé confesó en Lo de Évole que llegó a consumir dos gramos de cocaína al día, éxtasis y marihuana, hasta que su cabeza un día hizo click y lo dejó: “el mismo día, al mismo tiempo, subiendo unas escaleras hacia un escenario”.
Milá, que ha tenido una relación estrecha con el cantante dese hace décadas, ha mostrado su incredulidad hacia el discurso del artista. “Yo no me creo ni una palabra de las adicciones, ni una palabra”, ha declarado la presentadora. “O yo estoy totalmente equivocada o ni adicciones, ni droga, ni nada de nada”, ha añadido.
El discurso de Miguel Bosé sobre dejar las drogas de un día para otro fue duramente criticado por expertos y personas que han sufrido adicciones. Elena Presencio, directora general de la Asociación Proyecto Hombre, explicó a El HuffPost que la realidad no es habitualmente como la pintó el cantante.
“La realidad es que se sale, pero se necesita apoyo, acompañamiento, ayuda. La persona es la que sale, pero acompañada por profesionales que desarrollan la competencia de las personas, evalúan el entorno y las circunstancias”, aclaró la experta.
Por su parte, la psicóloga clínica María Hurtado avisó del impacto que pueden tener discursos como los de Bosé u otros famosos sobre la población. “Todo estaba en la mente” o “las fuerzas que a uno le hacen tomar estas decisiones tan radicales solo vienen de dentro”, son algunas de las explicaciones que dio el cantante. Para Hurtado esto es una manera de expresar la fuerza de voluntad, pero puede ser un arma de doble filo para algunas personas.