Un mercader de armas que huyó de España se ve con Juan Carlos I en Abu Dhabi
Abdul Rahman El Assir, en busca y captura por un presunto delito fiscal en nuestro país, acompaña con frecuencia al rey emérito, según 'El País'.
Abdul Rahman El Assir, un mercader de armas hispano-libanés, ha sido visto acompañando a Juan Carlos I en Abu Dhabi, según ha publicado este lunes en exclusiva de El País. Tal y como han apuntado testigos presenciales a dicho diario, el rey emérito ha recibido la visita de dicha persona en el complejo privado en el que reside desde que abandonó España en el verano de 2020.
Asimismo, y según ha recogido El País, sobre El Assir pesa una orden de busca y captura internacional, puesto que está huido de España, donde no se presentó a un juicio en el que se le acusa de defraudar 14,7 millones a la Hacienda española.
El mismo medio de comunicación ha publicado que un portavoz de Zarzuela ha respondido que las actividades privadas de Juan Carlos I ya no dependen de la Casa del Rey, mientras que el abogado del anterior monarca español, Javier Sánchez Junco, ha optado por no realizar ningún comentario sobre esta información.
Una relación que se remonta a los 80 y a las monterías
El mismo medio de comunicación ha dado a conocer que el vínculo entre este mercader de armas y el rey emérito se remonta a la década de los 80 y que es pública, puesto que se apoya en un núcleo de amigos comunes y en la afición por las monterías, es decir, la práctica de la caza.
Uno de los testigos presenciales de estos encuentros entre el mercader de 71 años y Juan Carlos I ha dicho a El País que cree que está utilizando esa antigua relación como “escudo” ante sus causas judiciales.
El Assir eludió los tribunales en 2018
El comerciante de armas tenía que haberse presentado a una cita en un juzgado de la Audiencia Provincial de Madrid, el 4 de octubre de 2018, tal y como ha recordado el diario español apuntado que hasta ahora el paradero de El Assir era una incógnita.
Aquel día, el hispano-libanés alegó que se encontraba enfermo en Suiza y logró que se retrasase la vista oral durante un mes. Posteriormente, tampoco se presentó el 5 de diciembre ni el 5 de febrero y ni, finalmente, el 5 de marzo. Según ha confirmado una fuente oficial de Fiscalía a El País, “la orden [de busca y captura] fue dictada y sigue vigente”.