Meghan Markle, sobre sus ideas suicidas: "Quise buscar ayuda, pero no me dejaron"
"Ver que la oficina de mi hermano hacía exactamente lo que nosotros dos dijimos que nunca haríamos me rompió el corazón", lamenta el príncipe Harry.
En su polémica entrevista con Oprah Winfrey, Meghan Markle ya mencionó que llegó a tener ideas suicidas mientras estaba embarazada de Archie por la presión mediática que vivió. En el documental Enrique y Meghan de Netflix, tanto ella como el príncipe Harry ahondan sobre esos difíciles momentos.
Es la madre de ella, Doria Ragland, quien introduce el tema en el cuarto episodio. “Recuerdo que ella me dijo que había querido quitarse la vida, y eso me rompió el corazón”, rememora ante la cámara.
“Esos buitres la acosaban constantemente, le estaban consumiendo la vida”, lamenta la madre, refiriéndose al acoso de la prensa británica.
“Sabía que lo estaba pasando mal. Bueno, los dos, pero nunca pensé que llegaría tan lejos”, dice a continuación el príncipe Harry sobre su mujer. “Y el hecho de llegar hasta ese punto me hizo sentir enfadado y avergonzado”, reconoce.
El hijo de Carlos III lamenta en el documental que pesó más su estatus que su rol como esposo: “No lo llevé bien, lo gestioné como un miembro de la institución en vez de como marido. Y lo que se apoderó de mis sentimientos fue mi papel como miembro de la realeza. He sido entrenado para preocuparme más por lo que la gente pensara si no íbamos a tal evento. Si ahora echo la vista atrás, me odio a mí mismo por eso”.
Markle apenas hace declaraciones sobre el tema, pero su frase es de lo más contundente: “Quise buscar ayuda, pero no me dejaron. Les preocupaba cómo afectaría eso a la institución”
Como cuenta Harry, refiriéndose a su familia, “sabían lo mal que estaba y decían ‘¿Por qué no puede lidiar con ello?’, ‘Todos los demás lo hacen, ¿por qué ella no?’. Pero esto era diferente. Pero aunque dijéramos vale, es lo mismo. ¿En serio debería haber aguantado como otros miembros de la familia? ¿O tal vez ya es hora de parar?”.
El príncipe se muestra enfadado con el hecho de que nadie en palacio hablara con los editores y les pidiera que cesaran el acoso: “Mi padre me dijo ‘Hijo, no puedes enfrentarte a los medios. Siempre hablarán’. Discrepo”.
En ese momento, Harry pasa a contar cómo funciona la maquinaria de comunicación dentro de la casa real británica, un sistema al que critica duramente: “Llevo 30 años viendo entre bambalinas cómo funciona todo. Hay briefings constantes sobre otros miembros de la familia, sobre favores, con prensa invitada... Es un juego sucio. Además de haber filtraciones, se inventan historias. Si tu equipo de comunicación quiere eliminar una noticia negativa sobre ti, negociará y ofrecerá a cambio algo sobre otra persona [de la familia].
Sin mencionar a su padre, pero obviamente pensando en él, agrega: “Puedes decir que no sabías nada pero mi pregunta es: ¿has hecho algo para pararlo? Y la respuesta es no”.
“Guillermo y yo vimos lo que sucedió en la oficina de mi padre y acordamos que nunca permitiríamos que eso sucediera en la nuestra”, subraya. “Prefiero que me destroce la prensa antes que seguirles la corriente en este juego o intercambio de exclusivas. Ver que la oficina de mi hermano hacía exactamente lo que nosotros dos dijimos que nunca haríamos me rompió el corazón”, añade Harry.