La pedida de mano Megan Fox... con sangre incluida

Hace cerca de un año, al principio de su relación, Megan Fox le regaló a su nueva pareja, el rapero Machine Gun Kelly, su propio ADN. Como ella tenía que marcharse al extranjero a rodar, le obsequió con su propia sangre embotellada en un colgante, a lo Angelina Jolie y Billy Bob Thornton, que en su día llevaron collares con la sangre el uno del otro.

Conociendo eso, no es tan de extrañar —que lo es— que ahora que han dado el paso de comprometerse, la sangre también estuviera presente en la pedida de mano.

La protagonista de Transformes ha compartido este miércoles el vídeo del momento en el que el artista llevó la rodilla a tierra, que tuvo lugar el 11 de enero. “En julio de 2020 nos sentamos bajo este baniano [un tipo de árbol]. Pedimos magia. No sabíamos del dolor que enfrentaríamos juntos en un periodo de tiempo tan corto y frenético. Inconscientes del trabajo y sacrificios que la relación requeriría de nosotros, pero embriagados de amor. Y de karma”, escribió en Instagram.

“De alguna manera, un año y medio más tarde, después de haber atravesado juntos el infierno y de habernos reído más de lo que nunca imaginé posible, me pidió que me casara con él. Y como en todas las vidas anteriores a esta, y como en todas las vidas que le seguirán, dije que sí... Y luego nos bebimos la sangre del otro”, añadió la actriz, de 35 años, sin dar más detalles.

Por su parte el rapero, de 31, compartió con sus seguidores una imagen de la mano de Fox con el anillo de pedida: “Lo diseñé con Stephen Webster para que fueran dos: la esmeralda (su piedra de nacimiento) y el diamante (mi piedra de nacimiento), engastadas en dos bandas magnéticas de espinas que se unen como dos mitades de la misma alma, formando el oscuro corazón que es nuestro amor”.

Fox y MGK (así se conoce también al cantante), se conocieron en el rodaje de la película Midnight in the Switchgrass.

Se les vio juntos en mayo de 2020 y poco después hicieron oficial su relación en Instagram. Más tarde se conoció que la actriz había pedido el divorcio a su expareja, el actor Brian Austin Green, tras diez años de casados y tres hijos en común, puesto que llevaban varios meses separados.

El verano pasado, en un podcast, la actriz definió al cantante como su “llama gemela”: “En lugar de un alma gemela, una llama gemela es en realidad cuando un alma ha ascendido a un nivel lo suficientemente alto como para poder dividirse en dos cuerpos diferentes al mismo tiempo. Así que en realidad somos dos mitades del misma alma, pienso”.