Marcos de Quinto (Cs) pide cambiar su escaño porque había un chicle pegado en él
Lo típico en un Parlamento, vaya.
Seguro que hay muchos españoles a los que nuestros políticos les parecen como críos que se pelean en un patio. Mucho más tras la nueva convocatoria electoral, la cuarta en cuatro años.
Pero la historia que cuenta este viernes eldiaro.es parece confirmar este diagnóstico sobre nuestra clase política porque, si no, cómo se explica que un parlamentario pida cambiar su escaño porque había un chicle “pegado sobre su escaño”.
Ese parlamentario fue Marcos de Quinto, diputado de Ciudadanos, quien, según explica este rotativo, tuvo que pedir la ayuda de un ujier del Congreso para que se le sustituyera el escaño.
La mala suerte para De Quinto, que el asiento no pudo ser sustituido hasta que finalizó el Pleno, que había empezado a las 15:00 horas.
Según eldiario, esta es la primera vez que un escaño se sustituye porque aparece un chicle pegado en él, siendo habitual el cambio de asientos por otro tipo de desperfectos.