Cuando Manuel Valls formaba parte del Partido Socialista francés (fue primer ministro de Francia entre 2014 y 2016) se le situaba en la parte derecha del partido. Ahora que pertenece a Ciudadanos también se desmarca de la voz predominante y va por libre, tendiéndole la mano a Ada Colau para que gobierne en la alcaldía de Barcelona, cosa que no ha gustado en la formación naranja.