Miles de personas se manifiestan en Barcelona por la Diada en un ambiente de división interna
El presidente catalán, Pere Aragonès, ha recibido aplausos y abucheos a su llegada.
Miles de personas participan en la manifestación independentista convocada por la ANC en el centro de Barcelona con motivo de la Diada, recuperando las movilizaciones en la calle que quedaron interrumpidas en 2020 por la pandemia, aunque con menor afluencia que en años anteriores.
Ha comenzado a andar este sábado a las 17:14 ―hora simbólica que evoca el año 1714― y, cuando había recorrido los primeros metros, un espontáneo “contrario a la protesta” ―según la organización― se ha abalanzado hacia la cabecera, pero ha sido interceptado por miembros de seguridad.
La manifestación se celebra este año bajo el lema ‘Lluitem i guanyem la independència’ (Luchemos y ganemos la independencia) y los asistentes han comenzado la marcha al grito de ‘1 de Octubre ni olvido ni perdón’ e ‘I - inde - independencia’.
Al bajar por la Via Laietana, la manifestación ha pasado por delante de la comisaría de la Policía Nacional, que han blindado con vallas en todos sus accesos y varias furgonetas tanto de la Policía como de los Mossos d’Esquadra, y hasta las 17.45 no ha habido incidentes más allá de gritos de ‘Fuera la bandera española’, ‘Fuera las fuerzs de ocupación’, ‘1 de octubre ni olvido ni perdón’ y pitos; y a su paso por la patronal Foment del Traball ha habido gritos de ‘Independencia’.
La marcha está encabezada por la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, acompañada por miembros de entidades, sindicatos y plataformas de diferentes puntos de Catalunya y toda España. Sobre las 18.30 horas está previsto que se inicien los discursos de los presidentes de las tres entidades independentistas: hablarán Jordi Gaseni (Asociación de Municipios por la Independencia), Jordi Cuixart (Òmnium Cultural) y Elisenda Paluzie (ANC).
La manifestación de la Diada llega en plena división interna en el independentismo sobre cómo encarar la mesa de diálogo con el Estado, que se reactiva la semana que viene.
Tanto el presidente del Govern, Pere Aragonès, como miembros de su gabinete participan a título individual, pero han cedido el protagonismo a estas entidades que encabezan el recorrido hasta llegar frente a la estación de França, donde tendrá lugar el acto político.
En el transcurso de la manifestación Aragonès ha podido escuchar tanto gritos de ‘Presidente’ como algunos abucheos y pitos.
Antes de comenzar la manifestación, los exlíderes de la ANC, la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y el líder de Junts, Jordi Sànchez, han acudido a la cabecera a saludar a la actual presidenta de la entidad convocante.
Ante las divergencias estratégicas dentro del movimiento y la sensación de desmovilización que hacen auguran detalles como el del número de autocares fletados, la ANC ha bajado a un mínimo de 100.000 personas el listón que desea superar en la manifestación de este año, lejos de las 600.000 personas que según la Guardia Urbana participaron en 2019, la cifra más baja desde el inicio del “procés”.
Una desmovilización en la calle que contrasta con los resultados de las elecciones catalanas del 14F, en las que el independentismo superó por primera vez el 50 % de los votos y alcanzó una cifra récord de diputados, si bien la abstención también registró un máximo histórico, en plena cuarta ola de covid.