Macron cambia el color a la bandera de Francia
Relega el azul cobalto que Giscard d'Estaing eligió como un gesto de acercamiento a la UE y vuelve al marino original. Un guiño a la Revolución.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, decidió hace meses cambiar el azul cobalto de la bandera francesa que ondea sobre los edificios de la presidencia de la República por un azul marino. Una recomendación de su escenógrafo que lleva meses aplicándose pero que no ha llamado la atención hasta ahora.
La noticia fue anunciada por la Radio Europa 1, sobre la base de información contenida en el libro Elysée Confidentiel, de Eliot Blondet y Paul Larrouturou, publicado en septiembre pasado. La decisión de cambiar la tonalidad de la bandera se remonta a julio de 2020, cuando Jolens se lo propuso al jefe de Estado.
En 1976, bajo la presidencia de Valéry Giscard d’Estaing, el Estado francés introdujo un azul más brillante en la tricolor para que coincidiera con el azul de la bandera de Europa, un gesto de acercamiento a Bruselas. El blanco y el rojo no sufrieron modificaciones entonces ni se tocarán ahora.
El cambio se realizará en todas las banderas oficiales del país, una operación con un costo de 5.000 euros, pero aún no se ha completado.
La decisión fue objeto de debate y algunos colaboradores cercanos del jefe del Estado explicaron que la idea se inspiró en el “retorno a los colores de la bandera de 1793”, después de la Revolución. El director de operaciones del Elíseo, Arnaud Jolens, está en el origen de la iniciativa. En el citado libro, confiesa que visitó a Macron en su despacho en vísperas de la Fiesta Nacional de Francia de julio de 2020, blandiendo dos banderas con las diferentes tonalidades de azul.
″‘Por cierto, mañana cambiaré las banderas de todos los edificios de la presidencia’. El jefe de Estado sonríe. ‘Giscard había cambiado este azul por razones estéticas durante el acercamiento a Europa, pero la bandera que todos los presidentes arrastran desde entonces no era la verdadera bandera francesa’”, relata el libro, citado por Euronews.
“El presidente de la República Emmanuel Macron ha elegido para las banderas tricolores que adornan el Palacio del Elíseo el azul marino que evoca el imaginario de los Voluntarios del Año II, de los Poilus de 1914 y de los Compagnons de la Libération de la Francia Libre”, dijo la Presidencia. “También es el azul de la bandera que siempre ha ondeado bajo el Arco del Triunfo cada 11 de noviembre (Día del Armisticio)”, añadió.
La bandera con el azul marino había reaparecido en el Elíseo antes de esta fecha, habiendo aparecido siendo los discursos del presidente desde su discurso televisado del 31 de diciembre de 2018. Macron también ha añadido en 2018 una cruz de Lorena al logotipo de la presidencia, una supuesta referencia al general Charles de Gaulle, cuyo 50º aniversario de la muerte y el 80º del llamamiento del 18 de junio se conmemoraron en 2020.
La medida es perfectamente legal. Lo que exige la Constitución es que la bandera sea azul, blanca y roja, y lo sigue siendo. La decisión de modificar la tonalidad de un color es un privilegio al que puede recurrir el presidente.