Quién es Luis Medina, el hijo del duque de Feria implicado en el escándalo de las comisiones
Y quiénes son Alberto Luceño y Carlos Martínez-Almeida.
Este miércoles saltaba la noticia. La Fiscalía Anticorrupción presentaba una querella contra los empresarios Luis Medina y Alberto Luceño por cobrar comisiones millonarias al “inflar” los precios en la compra de material sanitario para la pandemia como mascarillas, guantes o test covid tras firmar tres contratos con la Empresa de Servicios Funerarios y Cementerios de Madrid.
A este escándalo, se suma que se ha conocido también en qué se gastaron los beneficios: yates, relojes de lujo y coches de alta gama.
Medina, uno de los empresarios implicados, además es habitual de las revistas del corazón al ser marqués de Villalba e hijo de Naty Abascal y el fallecido duque de Feria, Rafael de Medina y Fernández de Córdoba.
Criado dentro de la Casa de Medinaceli, una de las más importantes junto con la de Alba dentro de la aristocracia española, Medina se rodeó desde muy pequeño con la jet set y el mundo de la moda. Según recoge Vanitatis, su trato con diseñadores como Oscar de la Renta era excelente e incluso pasó algunas Navidades con Valentino.
Con el título de marqués de Villalba cedido por su hermano en 2021, Medina ya había luchado por tener anteriormente el de conde de San Martín de Hoyos en un litigio que finalmente perdió contra su tío Ignacio de Medina, duque de Segorbe. A pesar de esto, en una entrevista con ABC en 2018 aseguró que “los títulos no dan de comer”. “Me he criado rodeado de títulos y tal vez por eso no soy como algunos amigos que matan por conseguir uno”, destacó entonces.
En su faceta profesional, no ha tenido la misma suerte empresarial que su hermano mayor, Rafael de Medina Abascal—fundador de la firma Scalpers y ejecutivo de Inditex—.
Entre sus proyectos, tal y como recoge ABC, se encontraba el showroom Showme That, en el que se incluían firmas como Aquazzura, Oscar de la Renta, Intropia, Tete by Odette e Yliana Yepez. Entre sus empresas se encontraba también la dedicada a la intermediación de productos, Sextante Trade Desk, que creó en 2020 en pleno auge de la pandemia del coronavirus.
En 2018 participó como administrador de una de las empresas de su madre, Naty Abascal, concretamente de Nabain SL, de la que estuvo al frente entre junio y octubre de ese año.
También entre sus truncados proyectos profesionales intentó ser embajador de Dolce & Gabbana con un contrato millonario firmado en 2014, que finalmente no llegó a buen puerto con la firma italiana.
Aunque no haya tenido éxito en su labor empresarial, sí que ha sido todo un icono dentro del mundo del corazón. En 2014, la revista francesa Point de Vue lo calificaba como “el soltero más atractivo del mundo”. También se le incluía en el listado de los 50 hombres mejor vestidos del globo.
A nivel personal, también han sido muchos los rumores que han acompañado la vida sentimental de Medina. Entre otros muchos romances, estuvo cinco años con Alejandra de Rojas, hija de los condes de Montarco; en 2010 se le relacionó con Tamara Falcó, aunque finalmente no se llegó a confirmar nada, y su última pareja conocida fue Cristina Fontcuberta, hija de la duquesa de Estremera y el fallecido marqués de Bellamar, con quien estuvo entre 2017 y 2018.
Según la Fiscalía, su redes de contactos e influencias como personaje público podrían haberle servido para beneficiarse en las comisiones del Ayuntamiento de Madrid.
Tal y como recoge la querella, fue Medina el que contactó con el Ayuntamiento de Madrid valiéndose de su condición de personaje público y de la amistad que mantenía con un familiar del alcalde, su primo hermano y abogado Carlos Martínez-Almeida Morales.
Éste le habría facilitado el contacto de la coordinadora General de Presupuestos y Recursos Humanos del Área de Gobierno de Hacienda y Personal del Ayuntamiento de Madrid, como persona a la que se debía dirigir para concretar los términos de las operaciones. El Ayuntamiento de Madrid ha negado estas informaciones y ha señalado que “el familiar del alcalde no conoce a Luis Medina” y que “se pusieron en contacto con él a través de una tercera persona”.
En declaraciones con El Confidencial, Medina también ha negado la mayor y ha asegurado que no tenía relación ninguna con José Luis Martínez-Almeida ni con ningún familiar suyo. “No he hablado con familiares de Almeida. Cobré un millón, pero no es ilegal”, señala.
Luceño no ha estado tan presente en la vida pública como Medina, por lo que se desconoce su vida personal y empresarial no ha trascendido en los medios. Según recoge El País fue socio y director de EUDE (Escuela Europea de Dirección y Empresa) hasta 2013 —una empresa que estaría implicada según Infolibre en la trama Púnica— y vicepresidente de AEEN (Asociación Española de Escuelas de Negocio).
Según señalan en Eleconomista, Luceño fue también presidente y socio de Gekko Consultoría y presidió el Consejo de Gradín. Además, el empresario ha ejercido de asesor de presidencia, miembro de consejos de administración y director general de varias compañías multinacionales del sector textil y complementos —entre ellas la firma Unode50 y Poète—. Esto hizo que, según informa esta web, pudiera ser miembro del consejo de dirección de ACOTEX, la principal asociación textil de Madrid.
Según recoge la querella, Luceño se presentó ante el Ayuntamiento como “experto en importación de productos procedentes del mercado asiático, con fábricas en China a su disposición, y como agente exclusivo de la empresa malaya EEE, a través de la cual se iba a realizar la importación”.
Para ello, según informa El País, Luceño usó supuestamente documentos mercantiles falsos para hacerse pasar por agente exclusivo de la compañía vendedora, Len, una cadena de bazares localizada en Malasia.
Por su parte, Carlos Martínez-Almeida Morales, primo del alcalde y quien habría facilitado el contacto entre Medina y el Ayuntamiento de Madrid —relación que el Ayuntamiento de Madrid niega— es socio fundador del bufete Martínez-Almeida Abogados.
Antes de fundar este despacho, se licenció en Derecho en la Universidad Complutense de Madrid, realizó los cursos de Doctorado en la Universidad Autónoma de Madrid en Derecho Mercantil, además de cursos de postgrado en la Universidad de Georgetown en (Washington D.C., EEUU).
Tal y como se puede ver en la web del bufete de abogados, Almeida es además árbitro de la Corte Española de Arbitraje, secretario del consejo de administración y asesor jurídico de distintas sociedades del ámbito sanitario, industrial, tecnológico y financiero, además de patrono tesorero de la Fundación Anar de ayuda a la Infancia.