Los españoles y el sexo: satisfechos pero quieren más y fantasean con otros
Casi la mitad de los españoles lo hacen una vez a la semana aunque la mayoría querría subir su media, según la encuesta de YouGov para El HuffPost.
Hace 29 años que España entera se lanzó a hablar de sexo. La doctora Elena Ochoa consiguió con su programa de TVE romper el tabú que todavía existía entorno a este tema. Habló de masturbación, de fantasías sexuales, de homosexualidad... habló sin tapujos.
Ella quería saber y nosotros seguimos queriendo conocer cómo es el sexo de los españoles. Las noticias que nos llegan son muy satisfactorias: el 85% le dan una nota por encima del aprobado, y un 49,8% le pone entre un 8 y un 10. La puntuación más repetida es un 8, que la otorgan el 21,92% de los encuestados por YouGov en exclusiva para El HuffPost.
Y no solo eso: un 44,8% dice practicar sexo una vez a la semana. Luego están los que rompen la media (y quizás algún que otro somier) al asegurar que lo hacen todos los días. Son un 5,62%. En el lado opuesto están los del nunca, que los superan ligeramente al situarse en un 6,18%.
Pero en esto del sexo no todo son alegrías (lo sabe bien ese 6,18%), más de la mitad de los encuestados por YouGov querrían practicarlo más a menudo y lo de llegar al orgasmo es todavía una asignatura pendiente para algunos. Por no hablar de los juguetes eróticos, menos frecuentados que el punto G.
Esas son las conclusiones generales del estudio, aunque mejor ir por partes porque esto de los españoles y el sexo trae cola...
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Lo primero que tenemos que hacer es darle una alegría a David Broncano. A su habitual pregunta de follar en La Resistencia (¿cuánto lo has hecho en el último mes?), cualquier español medio respondería 3,8 veces. No está mal teniendo en cuenta lo que dicen los invitados del programa pero ese 0,8 le daría muchos quebraderos de cabeza. Estamos convencidos.
La sorpresa en la frecuencia semanal está en quiénes son los más constantes y quiénes los más activos. Este grupo (una vez al día) lo lideran los jóvenes de 25 a 34 años (9%), seguidos de los de 35 a 44 (8%) y los mayores de 55 (5%). En los regulares (una vez a la semana) gana el grupo de 25 a 54 años, ahí uno de cada dos mantiene la media.
Claro que una cosa es lo que haces y otra lo que te gustaría hacer. Siempre puede ser más... Lo dicen los números.
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Al 56,93% de los españoles les gustaría subir su media, a ellos especialmente. Un 69% de los hombres responden sí a esta pregunta, las mujeres se quedan un poco más rezagadas con un 49%. Aunque tampoco está mal: una de cada dos quiere más.
Lo de los orgasmos ya es otro cantar. Escenas como esta se repiten con menos frecuencia en las camas (sofás, duchas...) españolas. Solo un 29% de las españolas llega siempre al orgasmo, mientras que en el caso de los hombres el dato sube al 62%.
Aquí mejor ver los datos generales...
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... y luego ya hablar de sexos. La cosa cambia.
(el morado corresponde a la respuesta de los hombres y el lila, a las mujeres).
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Donde no andamos muy sobrados es en fidelidad bajo las sábanas. Sólo un 32% de los encuestados dice que NUNCA piensa en otra persona distinta con quien está practicando sexo. ¡Solo el 32%! Eso significa que el resto (68%) deja volar su imaginación, aunque hay grados y grados: el 26% lo hace raramente; el 21%, de vez en cuando; el 8%, muy a menudo y el 3%, siempre.
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Bastante buen promedio de sexo semanal, nivel de orgasmos satisfactorio, nota alta a nuestra vida sexual... pero todavía hay cosas en las que no avanzamos.
Los juguetes sexuales siguen siendo una asignatura pendiente: todavía queda mucho camino por recorrer en este terreno. El 69% de los españoles son vírgenes en esta materia y aseguran no utilizar nunca estos aliados. Un 27% lo a hacen “a veces” y un residual 3% aseguran que recurren a ellos “muy a menudo”. Ellos ganan, los otros se lo pierden.
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Un rotundo “sí” a los preparativos. El ambiente, los aromas, música, iluminación suave. Rodéate de belleza, ¡el tantra es la celebración de todos los sentidos! La suavidad de la piel luego de un baño hace maravillas…
Los ojos son el espejo del alma, y cuando miramos profundamente a los ojos de nuestro amante, miramos su alma. Relájate y mira amorosamente a tu pareja, no cierres los ojos, conéctate con su interior.
Respira al mismo ritmo, entrégate al mismo paso. Comienza despacio, luego, a medida que el placer crece, acelera el ritmo. Cuando la respiración encuentra el ritmo, los cuerpos se mueven a ese mismo ritmo.
Cuando colocas tu mano en el pecho de tu amor, estás creando una conexión energética directa con su corazón. Nada más profundo, y a la vez vital, que sentir los latidos de dos corazones unidos, mientras la pasión aumenta.
Si estás dispuesto a vivir una experiencia diferente y profunda, anímate a explorar diferentes sensaciones, sin llegar a la penetración. Puede no ser fácil al principio, pero practicarlo será muy placentero.
Es importante reconocer los músculos que están presentes durante el orgasmo. A medida que utilices tus músculos de manera más consciente, tus orgasmos serán más controlados y satisfactorios.
Cuando aprendes a reconocer tus músculos, también aprendes a dominarlos. Recuerda que el sexo tántrico es una invitación a prolongar el encuentro sexual, cuando llegues a tus límites, cambia de ritmo para prolongar el placer.
