Los cinco pilares temáticos de Rosa Montero, Premio Nacional de las Letras
Con este tuit lo ha contado Rosa Montero (Madrid, 1951) a todo el mundo en su cuenta de Twitter, a las 11:44 del martes 14 de noviembre. Como gran periodista que es, ella misma se encargó de dar la exclusiva, incluso una hora antes del fallo oficial.
El premio otorgado por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte distingue toda la obra literaria de un autor español cuya creación forme parte del conjunto de la literatura española contemporánea en cualquiera de las lenguas españolas. El premio está dotado con 40.000 euros.
Rosa Montero, columnista del diario español El País, empezó en el periodismo a comienzos de los años setenta. La escritora ha publicado 14 libros, el primero de ellos Crónica del Desamor, en 1979. Las relaciones sentimentales, los laberintos del amor, son algunos de sus temas más recurrentes. En los últimos años ha creado un personaje futurista, Bruna Husky, para abordar la naturaleza humana. Montero sabe que el tiempo lo toca todo, menos el corazón. Los temas que ha tratado en sus 14 novelas son la muerte, la memoria o la identidad.
La mirada a esa naturaleza humana en un mundo futurista es su penúltima exploración literaria en El peso del corazón (Seix Barral), protagonizada por Husky, una androide, calificada por ella como su novela más política y realista. Es una narración de género fantástico con vocación de thriller. Un desafío porque España no tiene esa tradición. Las razones de esa injusticia las encuentra en que este ha sido "un país de un realismo brutal. No ha habido tradición fantástica, y la ciencia ficción forma parte de la anchísima tradición de lo fantástico", afirmó en una entrevista a El País en 2015. El segundo aspecto lo atribuye a que considera España un país inculto en el campo de la ciencia. "Incluso Unamuno decía 'que inventen ellos'. Es una tradición de resistencia a la ciencia brutal".
Memoria
Sobre la memoria, uno de sus temas, Montero ha dicho: "La memoria es un cuento que nos contamos a nosotros mismos y que vamos rehaciendo. El cerebro es un arquitecto constante. Necesita equilibrio y orden porque la vida es puro caos. Es imaginación y nos completa la vida para darle una apariencia de sentido. Es el creador de nuestras vidas, de alguna manera. Busca crear un relato de nuestra vida. Eso quiere decir que nuestra identidad es una creación imaginaria y en constante cambio porque la identidad se basa en la memoria, la identidad por eso es múltiple y deslizante".
Imaginación
Montero siempre ha dicho que la imaginación no es un arma solo de los creadores, porque la fantasía es un ingrediente básico para vivir. "Somos sobre todo nuestros sueños, que es lo que nos permite vivir. Porque la vida de todos es fundamentalmente imaginaria", me dijo en una entrevista sobre La loca de la casa, en el año 2003, para Babelia.
Identidad
La idea que cada individuo tiene de sí mismo es basa, según la autora, en la memoria "y esa memoria es una construcción imaginaria. De lo que necesites. Si nuestra identidad es nuestra memoria, entonces nos inventamos nuestra identidad, porque nos inventamos lo que recordamos y lo modificamos".
Cómo son las personas, cómo actúan es otro de los temas de Montero. Sobre la identidad, a la autora madrileña le gusta citar a Henry Michaux: "El yo es un movimiento en el gentío'. Claro, la identidad es una realidad resbaladiza y la realidad también los es".
Muerte
"Lo que no nos cabe en la cabeza es la idea de la muerte, de la desaparición, de que no exista nada. La mayoría vive sin pensar que van a morir, yo no. Los novelistas somos más conscientes del paso del tiempo, estamos obsesionados con la idea de la muerte y escribimos contra eso. Pero la gran mayoría de humanos vive como si fueran eternos. Es un mecanismo de defensa seguramente", ha dicho la ganadora del Nacional de las Letras.
Aunque cree la muerte no está mal, después de todo: "Si estás lleno de muerte, estás lleno de vida también, eres muy consciente de la vida. La tragedia del ser humano es ser mortal, todo lo que hacemos es contra la muerte. Y la vida se convierte en una estafa. Si supiéramos cuando nos vamos a morir sería terrible. Esa es la gran pena de la pena de muerte, el ir descontando los días, es una tortura monstruosa; y si lo supiéramos no lo podríamos soportar".
Amor
Las obra de Montero hablan de la búsqueda del ser humano por amar y ser amado, introduce a sus criaturas en ese laberinto y los muestra indefensos, solos, al fin y al cabo. "La salida a esa soledad la buscamos en el amor, incluso sin sexo. Pero en un gran momento de enamoramiento tu individualidad se borra al fundirse en el otro". Es el zarpazo del miedo. "Es por el temor a perder ese amor o persona que nos ama. No quieres depender tanto porque una vez te entregas estás perdido. No quieres perder el control de tu vida, porque la mirada y el amor del otro te dan la vida. Ese miedo nos hace muchas veces romper las historias. Es un mecanismo de defensa".
Bibliografía
La siguiente es la obra publicada de Rosa Montero: Crónica del desamor (1979), La función Delta (1981), Te trataré como a una reina (1983), Amado Amo (1988), Temblor (1990), Bella y Oscura (1993); La hija del caníbal, Premio Primavera de Novela y Premio Círculo de Críticos de Chile en 1997, El corazón del Tártaro (2001); La Loca de la casa (2003), Premio Grinzane Cavour al mejor libro extranjero publicado en Italia en el 2005 y Premio Roman Primeur de Saint-Emilion, en Francia en 2006; Historia del rey transparente (2005), Premio Mandarache 2007; Instrucciones para salvar el mundo (2008), Lágrimas en la lluvia (2011), La ridícula idea de no volver a verte (2013), Premio de la Crítica de Madrid (2014) y Prix du Livre Robinsonnais 2016 de la Bibliothèque du Plessis Robinson, Francia, El peso del corazón (2015) y La carne(2016). También ha publicado el libro de relatos Amantes y enemigos, y dos ensayos biográficos, Historias de mujeres y Pasiones, así como cuentos para niños y recopilaciones de entrevistas y artículos.
Rosa Montero se une a la siguiente lista de premiados con el Nacional de las Letras:
- 2016—Juan Eduardo Zúñiga
- 2015 — Carme Riera
- 2014 — Emilio Lledó
- 2013 — Luis Goytisolo
- 2012 — Francisco Rodríguez Adrados
- 2011 — José Luis Sampedro
- 2010 — Josep María Castellet
- 2009 — Rafael Sánchez Ferlosio
- 2008 — Juan Goytisolo
- 2007 — Ana María Matute
- 2006 — Raúl Guerra Garrido
- 2005 — José Manuel Caballero Bonald
- 2004 — Félix Grande
- 2003 — Leopoldo de Luis
- 2002 — Joan Perucho
- 2001 — Miquel Batllori
- 2000 — Martín de Riquer
- 1999 — Francisco Brines
- 1998 — Pere Gimferrer
- 1997 — Francisco Umbral
- 1996 — Antonio Buero Vallejo
- 1995 — Manuel Vázquez Montalbán
- 1994 — Carmen Martín Gaite
- 1993 — Carlos Bousoño
- 1992 — José Jiménez Lozano
- 1991 — Miguel Delibes
- 1990 — José Hierro
- 1989 — Joan Coromines
- 1988 — Francisco Ayala
- 1987 — Rosa Chacel
- 1986 — Gabriel Celaya
- 1985 — Julio Caro Baroja
- 1984 — J.V. Foix