El 'plan B' de Lidl para reeditar su mayor éxito de ventas
Cuesta menos de 200 euros y, por ahora, solo puede comprarse online.
Lidl vuelve a la carga con el producto más esperado. Después de que el pasado mes de enero la Justicia le obligara a retirar el robot de cocina Monsieur Cuisine por infringir los derechos de Thermomix, la cadena de supermercados alemana ha decidido volver a apostar por este producto. Esta vez ha lanzado Prospero, un robot de cocina de la marca Kenwood.
Su precio es de 199,99 euros y, por el momento, solo se puede comprar a través de su web, por lo que no se podrá ver si se vuelven a formar las colas que provocaba cada reposición de Monsieur Cuisine.
El aparato tiene una potencia de 900W, funciona enchufado a la corriente. “El máximo control de la temperatura te permitirá cocinar sin límites todo tipo de platos, desde templar chocolate hasta preparar frituras y sofritos”, señalan en la web de Kenwood.
El robot incluye una báscula para pesar los alimentos con un fallo de un gramo y la capacidad del vaso es de 4,3 litros, mayor que los 3,1 litros de Monsieur Cuisine. Las medidas de Prospero también son menores que las de su antecesor, mide 29 x 31 x 24 centímetros y tiene un diámetro de 23 centímetros.
El electrodoméstico va acompañado de varios accesorios, por ejemplo, una batidora en K, otra de varillas, un gancho para amasar, espátula, un procesador de alimentos (de 1,5 litros) con cuchillas de acero inoxidable y tres discos distintos para rallar o cortar, y una carcasa para exprimir zumos.
Además, este robot de cocina tiene su propia app gratuita para Android e iOs llamada Kenwood World en la que se pueden encontrar recetas.
La compañía Vorwerk, propietarios de Thermomix, demandó el pasado año a Lidl por plagiar su robot de cocina con el modelo Monsieur Cuisine, todo un éxito de ventas de la cadena de supermercados. El pasado mes de enero la Justicia dio la razón a la compañía de Thermomix y dictaminó que Lidl tenía que retirar todos los robots de cocina de sus tiendas.
El Juzgado concluyó entonces que la máquina comercializada por Lidl “reproduce todas y cada una de las características” de la patente de Vorwerk, por lo que infringido la Ley de Patentes. Además, en el juicio la titular de la patente reclamó en el juicio una indemnización equivalente al 10% de las ventas de la máquina comercializada por Lidl.