Leonor no se ha convertido en princesa por sorpresa como le ocurrió a Anne Hathaway en 2001, pero sí que se puede haber quedado igual de asombrada que la actriz al obtener otro título con el que no contaba: el de la influencer de la Casa Real.
La princesa de Asturias no ha podido acudir a muchos actos este año debido a que la pandemia ha reducido de forma significativa la agenda de la familia real. Sin embargo, se ha dejado ver en YouTube, donde se ha convertido en la verdadera protagonista de la institución.
La primogénita del rey Felipe es la que más miradas acapara en el canal de Casa Real, que tiene 100.000 suscriptores. En él se comparten las actividades institucionales, algo que a priori no parece que tenga demasiado tirón, hasta que Leonor aparece en alguno de ellos.
A pesar de su poca presencia en el canal, cuando aparece en los vídeos las reproducciones doblan el número de suscripciones: superan las 200.000 visualizaciones.
Eso sí, la española es de las pocas monarquías europeas que aún no se ha atrevido con una cuenta de Instagram. Si en algún momento lo hace... tiembla, Dulceida.
La evolución de la princesa Leonor y la infanta Sofía juntas