Las reflexiones de Génova 13 tras la convención
"Un punto de inflexión", "la centralidad", "lo cobarde es irse a otro partido"...
Grito de "Viva España". Se da por concluida la convención nacional del PP. Los asistentes salen en masa, muchos se quieren hacer selfies con Pablo Casado. Los periodistas cierren sus crónicas a toda prisa. Los operarios empiezan a desmontar el escenario. Se vacía el pabellón 1 del madrileño recinto ferial de Ifema.
Y toca digerir lo que ha pasado durante estos tres intensos días de cónclave popular. "Es un punto de inflexión", indican fuentes de la dirección del Partido Popular. Hay euforia en el equipo de Casado por esta convención, les gusta cómo ha salido -aunque haya salido alguno rana como el portavoz de Tabarnia-.
Justo este domingo se cumplían seis meses la llegada de Casado al cargo al vencer en las primarias a Soraya Sáenz de Santamaría. Y esta convención para rearmar ideológicamente al partido había sido una de sus grandes promesas. En Génova creen que han cumplido a tiempo con los deberes: han logrado pactar en Andalucía, designar a todos los candidatos para las municipales y autonómicas del 26 de mayo y cerrar con éxito este encuentro.
El tablero de los pactos
Hay varias razones por las que están satisfechos. Fuentes de la dirección del PP explican que en esta convención ha quedado patente que ellos están en la "centralidad" para lograr acuerdos. En el entorno de Pablo Casado sostienen que Santiago Abascal (Vox) y Albert Rivera (Ciudadanos) "no se hablan". Por lo que, en su análisis, "no va haber mayorías alternativas sin el PP". "Y si las hay, sería el acta de defunción de Ciudadanos", analizan las fuentes apuntando a la tentación de un pacto de los naranjas con socialistas.
Casado ha dado un largo discurso este domingo en el que ha llamado a los exvotantes del partido que se han marchado a 'imitadores' como Vox y Cs. Un speech en el que ha desgranado también sus políticas. Lo había trabajado mucho, ha sido muy meticuloso, con muchas partes aprendidas de memoria y que ha hecho sin papeles en el atril (con algo de ayuda de teleprompter).
Según el entorno de Casado, el líder quería poner sus ideas, el plan que tiene para España, que la gente conociese sus propuestas. Pasar de esa "imagen de chicos majos" del nuevo PP a un proyecto concreto de país.
"No es Trump, más estilo Clinton"
Una visión en la que quiere vender a España mayores espacios de "libertad" para los ciudadanos. "Más sociedad, menos Gobierno". Esa idea está conectada, según fuentes populares, con la "big society" a la que apelaba el ex primer ministro británico David Cameron. "Esto no es Trump, se parece más al estilo de Bill Clinton", recalca el entorno de Casado.
El discurso ha sido escuchado en primera fila por la dirección del PP y con invitados estrellas como José María Aznar y al exsecretaria general María Dolores de Cospedal. Mariano Rajoy no ha querido ir al cierre. En la dirección del PP revelan que Aznar le pidió ayer por la tarde a Casado ir porque le haría "ilusión", mientras que Rajoy le trasladó que todo el protagonismo tenía que estar en el nuevo líder.
En Génova dicen que se ha visto un partido "unido" durante estos días, a pesar de que Rajoy y Aznar no han coincidido. Pero las fuentes agregan que el líder se lleva bien también con Soraya Sáenz de Santamaría y Fátima Báñez, por ejemplo, con las que coincidió en el AVE de Sevilla a Madrid el viernes. Además, el propio Casado se preocupa por la situación de ellas dos y les pregunta.
Arranca una larga precampaña
Se apagan las luces, pero el PP no para. Pablo Casado es hiperactivo, ha estado presente los tres días en primera fila escuchando todas las ponencias. No se ha perdido ni una. A partir de la semana que viene comienza "la tercera vuelta a España", para estar en actos con candidatos regionales. Modo total de precampaña. Y va a seguir insistiendo en las tesis que ha expuesto este domingo: tienen ideas y experiencia de Gobierno. "Todos ven que el partido se mueve", señalan en su entorno sobre la ilusión generada entre los cargos por esta convención. "Un nuevo conservadurismo", defienden, que atraiga a los jóvenes.
Como decía una persona muy cercana a Casado: ha sido vital esta convención porque los asistentes ha salido con la sensación "de que hay un camino, una dirección". Y el mandato de Casado de trasladar ya a las plazas y as calles este plan claro por parte de todos los candidatos.
Los populares quieren volver a sentirse orgullosos de sí mismos y encarar esa batalla tan dura con Vox y Ciudadanos. Y como comentaba al acabar la convención este miembro de la dirección: "Lo cobarde es irse a otro partido, lo valiente es lo que ha hecho Pablo".