Las empleadas del hogar responden al Gobierno: "Si somos actividad esencial, nuestros derechos también lo son"
Creen que la medida del Gobierno es "insuficiente" porque no llega muchas de las trabajadoras al ser un sector donde más de un tercio de empleadas no tiene contrato.
“Las trabajadoras del hogar hacen un trabajo importantísimo que, por desgracia, no es reconocido. No puede ser que vuelvan a ser las grandes olvidadas”. Así ha anunció Pablo Iglesias este martes, en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros la decisión del Gobierno de dar luz verde a un subsidio de desempleo temporal que pueden solicitar las empleadas de hogar, que hasta ahora no contaban con este derecho, si se quedan en el paro o ven reducidas sus horas de trabajo en esta crisis del coronavirus.
La cuantía de este subsidio extraordinario será del 70% de la base de cotización de la empleada de hogar. Este grupo de trabajadoras, que lleva años librando una lucha para la ratificación del convenio de la Organización Internacional del Trabajo que ampliaría sus derechos laborales, considera que la medida no es suficiente y que los cambios deberían realizarse con “más profundidad” y “desde el problema raíz”, dice Rafaela, representante de la asociación Territorio Doméstico a El HuffPost.
Por eso, varias asociaciones de empleadas del hogar han lanzado este martes un comunicado, Luces y sombras sobre el subsidio extraordinario para trabajadoras del hogar, en el que se dirigen al Gobierno para manifestar que la medida tomada es, entre otras cosas, un logro de la sociedad civil, “que defendió unos derechos que no están en cuarentena”. Ellas valoran “positivamente” que se reconozca por primera vez un subsidio de este tipo para “las despedidas y las que han tenido que suspender el contrato”.
Un paso definitivo para su derecho al paro
Las trabajadoras del hogar esperan que sea “un paso decisivo para el reconocimiento definitivo del derecho a la prestación por desempleo del único sector laboral que permanece excluido”, “para la incorporación plena en el régimen general de la Seguridad Social y, que la declaración acerca de la ratificación del Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo, no vuelva a quedarse pendiente”.
Pero es “insuficiente” teniendo en cuenta “los altos niveles de economía sumergida que hay en el sector, donde más de 200.000 personas están sin contrato”. Por otro lado, explican que si el subsidio es equivalente al 70% de la base reguladora y muchas de ellas cotizan por tramos y por debajo de sus salarios reales, este 70% queda muchas veces por debajo de lo que correspondería ante la administración.
Insisten en que la falta de derechos reconocidos hace que, en situaciones como esta donde es esencial el cuidado de las personas mayores y dependientes, quedan totalmente desprotegidas ante las consecuencias del coronavirus: tanto el contagio como las consecuencias económicas.
Se preguntan también si habrá una exoneración de la cuota a la Seguridad Social que sí se ha tenido en cuenta para las empresas que tramiten ERTEs en base a fuerza mayor vinculada al COVID-19. “Esperamos, que también se reconozca en este caso como apoyo a las familias empleadoras con niveles de renta más bajos, afectadas en sus ingresos por la crisis actual, y como mecanismo de protección a las trabajadoras. Si somos actividad esencial, nuestros derechos también lo son”.
Creen que este último paso de exonerar a las familias del pago de la cuota es esencial “para alcanzar el reconocimiento de todos los derechos de forma definitiva para las trabajadoras, incluidas aquellas sin contrato. Sólo así nadie quedará atrás”.