La 'semana horribilis' de Feijóo: del CIS al lío con la excepción ibérica

Se prometía como una buena semana. Primero, debate en el Senado el martes con el presidente del Gobierno, una oportunidad maravillosa para confrontar el modelo económico del PP frente al del Ejecutivo.

Después, viaje a Bruselas para codearse con los altos cargos de la Unión Europea y con el resto de colegas del PP en el continente. Proyección internacional, respaldo a las propuestas económicas del partido...

Y sin embargo, al final de la semana, el balance no es precisamente positivo para el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo. Más bien, al contrario.

Ya arrancó mal el lunes con la publicación del barómetro del CIS, que dio una ventaja de cuatro puntos al PSOE frente al PP, confirmando el estancamiento del ‘efecto Feijóo’.

Pese a que el resto de encuestas privadas apuntan a una victoria de los populares, lo cierto es que todas coinciden en que el avance del PP se ha detenido y que el PSOE aguanta el pulso cuando todavía queda un año para los comicios generales.

Como de costumbre, el PP no dio credibilidad al barómetro del CIS asegurando que “no dio una” en anteriores pronósticos.

“Son las cosas de Tezanos”, resumió el coordinador general del PP, Elías Bendodo, ante los periodistas, a los que lamentó “el intervencionismo socialista” en el CIS.

Despejado este asunto, el PP se centró en el debate que el martes se iba a celebrar en el Senado entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y Feijóo.

Un debate desigual por los tiempos de intervención de cada uno, algo en lo que el líder del PP centró gran parte de su alocución, quejándose y pidiendo más minutos al presidente del Senado, al que llegó a entregar un documento de propuestas en materia energética y económica.

Fue una intervención dura la de Feijóo, en la que más que proponer, pasó al ataque. Acusó al Gobierno de no haber recuperado el nivel económico previo a la pandemia, de no saber contener la inflación y de endeudar al país.

“Han errado en todas las previsiones económicas desde que llegaron al Gobierno; no lo digo yo, lo han dicho todos los organismos internacionales. Que el Gobierno haya fallado siempre en sus previsiones económicas y que construya sus últimos presupuestos sobre proyecciones desmontadas por falsas, ¿es insolvencia o mala fe?”, dijo usando la frase que le espetó Sánchez en el anterior debate entre ambos.

“La España que deja es de menos riqueza, menos empresas, más desigualdad y más pobreza. Esta España necesita un gobierno que crea en ella y usted no cree en España. Y los españoles han dejado de creer en usted”, agregó, durísimo, Feijóo.

En su larga respuesta, Sánchez ironizó con su falta de propuestas económicas y le instó a no utilizar bulos contra el Gobierno. Además, le recordó su basta “experiencia” en política y le achacó haber aumentado la deuda de Galicia durante su presidencia en esa región.

Aun así, el presidente del Gobierno intentó no elevar demasiado el tono respecto a Feijóo, tratando de proteger al máximo la negociación de la renovación del Poder Judicial que el Ejecutivo mantiene con el PP.

No salió mal parado el líder popular, pero tampoco triunfó como cabría esperar.

Con la resaca del debate, el presidente del PP viajó a Bruselas para asistir, el jueves, a la Cumbre Estatutaria del PP Europeo.

Pero antes se reunió con Ursula Von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, de su misma familia política, con la que, según fuentes del PP, estuvo reunido hora y media.

El encuentro tuvo lugar el miércoles, apenas 24 horas después de que Von der Leyen pusiera por las nubes la llamada excepción ibérica, que permite a España y Portugal desacoplar el gas del precio de la luz, lo que ha supuesto una rebaja sustancial de las tarifas respecto al resto de Europa.

“Saben que este modelo ha sido introducido en España y Portugal y ha reducido el precio de la electricidad. Así que creemos que merece la pena ser considerado para introducirlo a nivel europeo. (...) Merece ser observado en profundidad y ver cómo podemos hacerlo funcionar a nivel de la UE”, dijo en rueda de prensa la máxima responsable comunitaria.

Todo un espaldarazo a la política energética del Gobierno español que dejaba en mal lugar al presidente del PP, cuyo partido se ha dedicado en los últimos meses a calificar de “timo ibérico” la excepción ibérica.

La semana fue de mal en peor cuando al día siguiente le preguntaron a Feijóo por este asunto.

El líder del PP sorprendió negando que él hubiera dicho nunca que la excepción ibérica fuera un timo.

“No habrá visto usted una declaración mía...”, le dijo a un periodista.

“El PP ha llamado el timo ibérico a la excepción ibérica”, le recordó el reportero.

“Insisto, usted no ha visto una declaración mía en relación a ese asunto”, volvió a repetir el líder del PP, quien añadió lo siguiente: “Tampoco ha visto usted ninguna declaración de la UE en favor de la ampliación de la excepción ibérica para toda la UE”.

Entonces, el periodista le volvió a recordar las palabras de Von der Leyen.

“Bueno..., va...vamos a ver lo que dice... la Comis... el Consejo de primeros ministros esta tarde”, acertó a contestar, entre balbuceos, el líder del PP.

Para colmo de males, esa misma tarde la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, rompía la estrategia del partido de no agresión al Gobierno respecto al asunto del Poder Judicial.

Ayuso, muy en su línea de ‘verso suelto’ del PP, aseguró en un acto en el que intervino que “sólo hay algo más peligroso y dañino que un Tezanos que arremete contra el necesario líder de la oposición y fabrica mensajes todos los días contra él para que lo repliquen los ministros sin pudor alguno”.

“Y es llenar el Poder Judicial de Tezanos disfrazados de jueces”, agregó. “Mientras las sentencias de los jueces son puestas en entredicho si no nos gustan, mientras se filtra el contenido de autos que no conocen los afectados o se anuncia que se imputa o desimputa a conveniencia un viernes por la tarde o una noche de verano, todo el poder y su imagen queda erosionado”, prosiguió Ayuso.

La presidenta madrileña llegó a afirmar que “el activismo está destrozando la credibilidad de uno de los mejores sistemas judiciales del mundo”. “Por una vez Sánchez fue sincero cuando dijo vamos a por todo”.

Puedes ver las declaraciones completas de Ayuso en este vídeo, a partir del minuto 19:45.

El broche ha sido ver cómo los socios parlamentarios habituales del Gobierno, lejos de ponerle en apuros con los Presupuestos, decidían este viernes no presentar enmiendas a la totalidad a las cuentas, que pasarán el trámite del debate de totalidad la próxima semana con votos suficientes.