La reflexión de Raquel Sánchez Silva sobre las redes y la salud mental

Alberto Chicote ha visitado este martes Cabo de Gata junto a Raquel Sánchez Silva. El chef y la periodista han recorrido la denominada Ruta de Los Piratas en la zona costera de Almería en el programa del cocinero, Fuera del Mapa. Durante el camino, Sánchez Silva ha reflexionado sobre la relación entre las redes sociales y la salud mental.

El cocinero ha preguntado a Sánchez Silva cómo la han tratado las redes y la prensa y ella ha confesado que fue de las primera en tener cuenta en Twitter –“de las primeras en un grupo amplio de personas que nos dedicábamos a la televisión”, ha matizado–. “Yo viví las redes en aquel momento con una total libertad, enamorada de ellas, esperanzada”, ha revelado.

Sin embargo, esta relación se truncó con el tiempo. “Es cierto que ahora mismo las redes son un lugar donde puede anidar mucho odio y mucha crueldad”, ha destacado. Además, ha señalado que “es evidente” que le han hecho daño en algún momento: “Porque a nadie le gusta que le insulten ni que le acosen”.

Así, ha relatado que “el que quiere hacer daño puede hacer mucho daño” a través de las redes. “Y además es que hay muchísimos comentarios y muchísimos mensajes que ya no solo van dirigidos a ti, van dirigido a tu vida, van dirigidos a tus hijos, amenazas, amenazas de muerte”, ha resaltado.

La periodista ha afirmado que considera que “esto acabará regularizándose, es que se tiene que regularizarse”. “Es imposible que siga siendo ese lugar en el que todo vale”.

“En mi caso me ha cogido con una edad en la que me puede doler, pero no me puede derribar”, ha apuntado. “Pero tenemos unos números de suicidio adolescente, unos problemas de depresión en críos que es suficientemente importante como para que darse cuenta de que no se puede dejar que eso siga creciendo a expensas de la salud mental de las personas”, ha afirmado.

Además, la periodista considera que esto se ha contagiado a la prensa. “Ha sido un efecto contagioso y la búsqueda del click y esa forma de expresarse, etcétera. Y eso también para una profesión que amo como es el periodismo pues sí ha sido al final doloroso en algunos casos”, ha contado.

“Cada uno hace lo que decide hacer y se tiene que hacer responsable de ello. A mí ya no me vale el ‘como lo decía todo el mundo’, porque hay demasiado en juego”, ha concluido.