La razón por la que Miriam Saavedra debe ganar 'GH VIP' (Telecinco)
Ni es la reina Inca, como le llaman los exaltados saavedristas, ni es tan inocente como Santa Teresa de Jesús. Miriam Saavedra es la justa ganadora de GH VIP (Telecinco), pero por muchos otros motivos que tienen menos que ver con la pureza de su alma.
El reality, objetivo constante de quienes defienden unos contenidos blancos en televisión, no pretende dar lecciones. La misma Nagore Robles lo dijo en uno de los debates y echó abajo el argumento de que debería desaparecer por ser telebasura, porque GH VIP es lo que es y ellos lo saben: puro entretenimiento y show, sin más misterio. Y Miriam Saavedra ha sido de las pocas concursantes que lo ha entendido al 100%.
La peruana sabe cómo sacar de quicio sin necesidad de generar una escena reprochable y ha sacado la peor parte del resto de concursantes, porque la tienen. Sus compañeros ya venían muy rodados: Suso dice que se retira ya de los realities, pero ya los ha hecho todos, así que se podría decir que lo retiran porque ya está agotado como personaje; Makoke era la única del clan Matamoros que quedaba por participar en uno; Tony Spina es ya un profesional de este tipo de programas, tanto como Oriana, que acostumbra a firmar, entrar y abandonar, por ese orden y así de fugaz; Aurah venía de MYHYV; Koala dice que no ha visto realities, pero a estas alturas ya es más que evidente que tenía estudiado el formato... Y podríamos seguir. Saavedra había pasado muchas veces por el Deluxe, pero tantas veces como Rosa Benito, Raquel Bollo o Makoke... al resto no les sirvió de nada.
Miriam entró en la edición de 2016 de Supervivientes como una completa desconocida, la expulsaron y se quedó sola en una isla con Yurena (tarea complicada). Juntas y solas se hicieron semanas de programa, dando show sin la ayuda de ningún otro Robinson... Y generó más contenido que el resto. Esta experiencia sirve para desmontar algunas de las críticas más repetidas por sus detractores en esta edición de GH VIP: no necesitaba a Mónica como antagonista para brillar.
La gente se ha enganchado al canal 24 horas hasta para verla dormir, por surrealista que suene. Ha sido la protagonista de las imágenes hasta en la cama, y no nos referimos al edredoning de siempre, al que sí que se han dedicado Suso y Aurah. La frase que Miriam dijo a Ángel Garó mientras dormía, "maldito muñeco", ya es un eslogan televisivo y una frase de merchandising. Creíble o no, pues hay quien duda de su sonambulismo, lo cierto es que ha hecho reír y ha dado uno de los vídeos más repetidos del concurso. Su frase ya suena más en los platós de Telecinco que el famoso "maravilloso" de Isabel Pantoja. Ha competido con la mismísima tonadillera, seguro de vida de la cadena de Mediaset.
Tan difícil era desbancar a la Pantoja como diluir la imagen del famoso pijama de Belén Esteban, que estaba llamada a convertirse para siempre en la cabecera de la edición VIP del concurso. Pero Saavedra también lo ha conseguido, y con un monosílabo: sí. Su contundente respuesta cuando Jorge Javier Vázquez le preguntó si tenía constancia de que su exnovio, Carlos Lozano, había estado con Makoke es el GIF más repetido de cualquier muro en Twitter.
La actitud de los concursantes de GH VIP con Miriam ha sido de acoso y derribo. Pero Miriam sabe latín. Es joven, pero no tonta. Todos han hecho un sobresfuerzo en vano por eliminarla. Es la ley de los realities: cuando todos hacen piña contra uno, el concursante solitario se convierte en víctima y ganador. La única excepción a la norma fue Olvido Hormigos en GH VIP 3.
Miriam ha estado nominada semana a semana y se ha ido haciendo fuerte. Sin darse cuenta, el resto de concursantes ha fidelizado a la plataforma de su contrincante, que la ha ido salvando. Ellos la han hecho ganadora.
Muchos como Suso han presumido de ser unos expertos en realities. Básicamente porque toda su vida se ha limitado a eso, a ser concursante. Él ha pasado por todos los de Telecinco y aún así, no ha tenido la inteligencia ni la suerte suficiente para ganar ni uno. El catalán, que curiosamente ahora es el niño reflexivo que no ha sido durante tres meses, ha llegado a la final gracias a que no ha salido nominado nunca y a que en la última eliminación, la de la final, entraba en juego un concursante mucho mas odiado, Asraf.
Este Gran Hermano ha sido todo show. Del bueno y también del malo. El peor de los espectáculos ha tenido protagonistas como Ángel Garó con comentarios racistas, Mónica Hoyos tirando las migas de la comida sobre Miriam, Suso y sus comentarios machistas, Omar incitando a Asraf a meterse en la cama de Miriam cuando ella estaba ebria... Todo han sido etiquetas, malas conductas, y trato peyorativo hacia una compañera. El bueno lo ha protagonizado Miriam, entendiendo dónde estaba y montándose una telenovela que ha dado más audiencia que Pasión de Gavilanes en su momento. El maldito muñeco ha sabido jugar sus cartas. Nos ha enseñado mil veces cómo se mata el gusano y lo ha pisado una y otra vez. Y al final lo ha hecho literalmente.