La Policía recupera la bicicleta robada de la deportista paralímpica Gema Hassen-Bey
La había dejado aparcada en el centro de Madrid para irse a celebrar el WorldPride.
La Policía Municipal de Madrid ha recuperado la bicicleta, valorada en cerca de 20.000 euros, que robaron durante el pasado fin de semana a la deportista paralímpica Gema Hassen-Bey, que la había dejado aparcada en el centro de Madrid para irse a celebrar el WorldPride con unos amigos.
Como ha informado la Policía en twitter, se ha recuperado el vehículo, diseñado especialmente para ella, en el centro de la capital, y ha sido una patrulla de Centro Sur.
Según han indicado fuentes de la Policía Municipal a Europa Press, agentes del cuerpo encontraron la bicicleta en la calle Tribulete alrededor de las 2.40 horas durante la patrulla nocturna y la llevaron a la unidad de Centro Sur.
El vehículo estaba abandonado y presentaba un defecto en la cadena de una de las ruedas que no tenía en el momento de la denuncia, durante la noche el 1 de julio.
La joven ha agradecido en las redes sociales la labor de la Policía y toda la campaña que se gestó ayer en torno a su causa para encontrar la bicicleta, con la que se estaba preparando para subir al Kilimanjaro -- en silla de ruedas--.
"EL MEJOR DESPERTAR DE MI VIDA"
"Gracias Pilar @policia @lgtbipol por esta llamada para comunicarme que han encontrado mi handbike. Ha sido el mejor despertar de mi vida", ha indicado en Twitter.
Ayer, en declaraciones a Europa Press, mostraba su "preocupación, cansancio y disgusto" por los hechos acaecidos, aunque esperaba un final feliz. Su bicicleta forma parte de un proyecto técnico que estudia y desarrolla un futuro vehículo que facilitaría a los minusválidos su movilidad por montaña respetando el medio ambiente.
El transporte de Hassen-Bey costó unos 20.000 euros y la propia atleta recordaba que se trata de un prototipo personalizado que solo puede utilizar ella.
La bicicleta desapareció la madrugada del sábado al domingo pasados en una plaza para discapacitados a la altura del número cinco de Ronda de Atocha. Estaba resguardada con cuatro cadenas que fueron cortadas con una radial. Cuando Hassen-Bey llegó a comprobar que su bicicleta no estaba, no se lo pudo creer. "Me he movido en mil eventos populares y nunca me había pasado", dijo.