La Policía identifica al autor de la amenaza de muerte a la ministra Reyes Maroto
Se trata de un vecino de El Escorial, en Madrid, diagnosticado de esquizofrenia.
La Policía ha identificado al responsable de la amenaza de muerte —un sobre con una navaja en su interior que aparentaba estar ensangrentada— que ha recibido este lunes la ministra de Industria, Reyes Maroto.
Se trata de un vecino de la localidad madrileña de El Escorial (Madrid) que sufre problemas psiquiátricos y había puesto su nombre y dirección reales en el sobre. Ha sido por eso mismo por lo que a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado no les ha costado dar con el supuesto responsable.
El juzgado de Instrucción número 13 de plaza de Castilla de Madrid se ha hecho cargo de la investigación de este envío. Mientras, la Policía Científica está investigando si existe conexión entre esta carta y las otras tres que contenían balas y que fueron remitidas el pasado jueves al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; a la directora de la Guardia Civil, María Gámez, y al exvicepresidente del Gobierno y candidato de Podemos a la comunidad de Madrid, Pablo Iglesias.
Interior ya ha reforzado la seguridad de Maroto, Iglesias y Gámez.
El sobre en el que el vecino de El Escorial introdujo el arma estaba dirigido a nombre de la ministra en la dirección del Ministerio y ha sido su secretaria quien ha encontrado el envío. La carta de Maroto llegó al Ministerio el viernes por la tarde en un sobre marrón acolchado y ha sido entregada esta mañana a su secretaria, que la abrió y avisó al jefe de seguridad, según ha explicado la ministra, que ha detallado que iba “camuflada” y llevaba un plástico que impedía ver lo que había debajo.
Fuentes de la investigación han precisado que la navaja estaba oculta entre dos discos compactos en un sobre acolchado de color marrón, que la carta ordinaria procede de El Escorial (Madrid) y que está fechada a día 21 de abril. Dos días después pasó por el control de seguridad, como figura en el sello que aparece impreso en el paquete y donde puede leerse: “Seguridad, Revisado en equipo de Rayos X”.
El arma, con mango marrón rematado con una cadenita, tiene varias manchas de color rojo que parecen sangre tanto en el anverso como en el reverso. El hallazgo se ha notificado inmediatamente a lo servicios de seguridad de la presidencia del Gobierno y al Ministerio del Interior.
El candidato del PSOE a las elecciones del 4M, Ángel Gabilondo, ha pedido que se condene cada amenaza de muerte de manera expresa. Esta nueva intimidación se produce días después de que Grande-Marlaska, la directora de la Guardia Civil, María Gámez, y el líder de Podemos, Pablo Iglesias, recibieran sobres con cuatro balas y cartas amenazantes.
La propia Maroto ha asegurado en la Cadena Ser que “lo importante es denunciar”. La candidata socialista ha interpuesto una denuncia en la comisaría de la Cámara baja. Y ha zanjado: “No nos pueden callar. Hay que defender la democracia y estas amenazas nos dan más fuerza
Precisamente el ministro Grande-Marlaska ha insistido también en pedir a todos los partidos una condena expresa de las amenazas y se ha solidarizado con su colega en el Consejo de Ministros: “Todo mi apoyo y mi respaldo a Maroto. Seguimos en esta trama de amenazas, y creo que tiene que haber un posicionamiento contundente”.
“Ha llegado en un sobre al ministerio con una navaja de tamaño medio con marcas rojas que la policía está analizando si es sangre o pintura. Para eludir el control de seguridad, el sobre incluía también un CD que evitaba que la navaja apareciera en el escáner. En el sobre, de tamaño folio y acolchado, venían también un montón de folios grapados con copias ampliadas de mensajes de Whatsaap y Twitter. Además, un folio manuscrito con palabras sueltas y frases que aún no podemos detallar”, explica una fuente de Industria, informa Antonio Ruiz Valdivia.
Los principales candidatos de los partidos en los comicios regionales han arropado a Maroto en Twitter. Iglesias ha dicho que “ya está bien de amenazas fascistas”.
El PP ha condenado la amenaza. “Desde el Partido Popular rechazamos todas las amenazas que se están conociendo en las últimas horas, tal y como acaba de destacar el presidente Casado”, han zanjado fuentes populares. La presidenta madrileña y candidata del PP, Isabel Díaz Ayuso, ha relacinado la condena a las amenazas con su lema de campaña.
Mónica García, cabeza de lista de Más Madrid, se ha preguntado que “cuántas amenazas hacen falta para que [Isabel Díaz] Ayuso deje de avalar la política del odio de la extrema derecha”.
La líder de Ciudadanos (Cs), Inés Arrimadas, ha calificado el envío de la navaja a Maroto como una “barbaridad”. Y ha pedido frenar la escalada de violencia: “Esto no puede seguir así, hacemos un llamamiento a la sensatez para frenar ya esta deriva”, ha remachado. Poco después ha sido su candidato en Madrid, Edmundo Bal, quien ha condenado también en Twitter “rotundamente” la amenaza a la ministra Maroto.
Una campaña marcada por amenazas, la violencia y el racismo
La campaña electoral madrileña está marcada por las amenazas y los actos violentos. Ya antes de que arrancara oficialmente, el exvicepresidente segundo del Gobierno se encaró a un grupo de neonazis que trató de reventar un acto de Podemos en Vallecas. Días después, en el mismo lugar, Vox celebró un mitin que terminó con dos detenidos y 35 heridos leves; entre ellos, 21 agentes.
La llegada de los sobres amenazantes con 4 balas de Cetme a la sede de Interior agitaron la campaña. Y la negativa de Vox a condenar taxativamente esas amenazas en el debate electoral organizado el pasado viernes por la Cadena Ser la reventó hasta el punto de que Pablo Iglesias abandonó la confrontación y Ángel Gabilondo y Mónica García le secundaron.
Antes de que el debate de la Ser hiciera saltar por los aires el marco de discusión de la campaña para las elecciones madrileñas, Vox volvió a agitarla con un cartel racista en la estación madrileña de Sol en el que señala a un menor extranjero y le criminaliza. Pese a que la Fiscalía pidió retirarlo por ser, supuestamente, constitutivo de delito, un juez rechazó quitarlo.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha advertido este lunes de que no va a dejar “que el odio se apodere de la convivencia en España”. Y ha condenado públicamente la amenaza que ha sufrido Maroto.