La OTAN aprueba un nuevo Fondo de Innovación de mil millones para apoyar 'startups' defensivas
El reto: que ese empuje “ayude a que la organización permanezca en la vanguardia tecnológica ante la creciente competencia internacional”.
Primera medida de la segunda y última jornada de la Cumbre de la OTAN en Madrid: 22 países de la treintena que componen la Alianza han firmado este jueves una carta que les compromete con el llamado Fondo de Innovación de la Alianza. Son mil millones de euros que se liberarán para poner en marcha mecanismos que impulsen las mejoras tecnológicas en el sector de la Defensa y apoyen a las startups del sector, de forma que hagan “más competitiva” la seguridad común. El reto: que ese empuje “ayude a que la organización permanezca en la vanguardia tecnológica ante la creciente competencia internacional”.
La firma del documento ha tenido lugar antes de que comenzase la sesión de trabajo de la mañana en Ifema, dedicada a los desafíos y amenazas de la vecindad sur. En ella han estado presentes España, Bélgica, Bulgaria, Chequia, Dinamarca, Estonia, Alemania, Grecia, Hungría, Islandia, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, Polonia, Portugal, Rumanía, Eslovaquia, Turquía y el Reino Unido.
Jens Stoltenberg, el secretario general de la Alianza, ha hecho una pequeña intervención para explicar que es “esencial” que se haga “todo lo posible” para “permanecer al día en inversión y tecnología”, un llamamiento que no sólo justifica el fondo lanzado esta mañana, sino que tiene de fondo el debate, duro, de poner más dinero para la materia país a país. En esta cumbre se quería insistir en que el 2% del PIB dedicado a Defensa es el suelo mínimo por el que comenzar, aunque sólo nueve países lo cumplen a día de hoy.
Stoltenberg ha sacado a relucir las dos grandes sombras que se ciernen sobre la defensa occidental, que son Rusia -elevada ayer en el nuevo Concepto Estratégico de a amenaza- y China -un reto-, porque “desafían” el liderazgo tecnológico aliado. Ha citado expresamente áreas como el espacio o la inteligencia artificial, donde Moscú y Pekín tienen mucho que decir.
De ahí la importancia de ser competitivos también en esos flancos y la necesidad, remarca, de poner fondos como el aprobado hoy, que ha calificado de ”único”. Porque no todo en la OTAN es Estados Unidos, tampoco, y hay muchos márgenes de mejora -o sea, de gasto- en otros países. Ahora se ha apostado por un fondo de capital riesgo multisoberano, que invertirá en empresas emergentes que se encuentren en una fase inicial y puedan contribuir a los objetivos estratégicos aliados, ha informado la oficina de Stoltenberg.
Ya ayer, en la declaración política que puedes leer íntegra al final de la noticia, los aliados destacaron su apoyo al establecimiento de un fondo de innovación en defensa multinacional y un Acelerador de Innovación de Defensa para el Atlántico Norte (DIANA, por sus siglas en inglés). “Estamos estableciendo un Acelerador de Innovación de Defensa y lanzando un fondo de innovación multinacional para reunir a los gobiernos, el sector privado y el mundo académico para reforzar nuestra ventaja tecnológica”, se lee en el texto. El fondo conocido este jueves es complementario a lo anterior, van en la misma línea, defiende el cuartel general de Bruselas.
La estructura
Según informa EFE, el pasado abril, los ministros de Exteriores aliados ya dieron luz verde a los estatutos de DIANA. Este proyecto, por su parte, reunirá a personal de defensa junto con empresas emergentes, investigadores y compañías tecnológicas de la Alianza para resolver problemas de defensa y seguridad.
Los innovadores que participan en los programas de DIANA recibirán acceso a su red de docenas de sitios de aceleradores y centros de pruebas en más de veinte países de la OTAN.
DIANA tendrá una oficina regional en Europa, seleccionada a partir de una candidatura conjunta de Estonia y el Reino Unido, y otra en Norteamérica, en Canadá. El Acelerador de Innovación de Defensa se centrará en la inteligencia artificial, el procesamiento de macrodatos, las tecnologías cuánticas, la biotecnología, el espacio o los materiales novedosos.
“Hemos respaldado una estrategia que garantizará la entrega sin inconvenientes del Sistema de Control y Alerta Aerotransportado de próxima generación y capacidades relacionadas”, destacaron los líderes de la OTAN en su declaración.