La OMS niega que el Covid saliera de un laboratorio: sería "un excelente guión para una serie"
Los expertos de la ONU investigan en Wuhan el origen del virus. Ya han visitado el mercado marcado como epicentro y han entrevistado a los primeros afectados.
Un equipo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se encuentra desplazado en Wuhan (China) para investigar el origen del coronavirus. Una de las teorías más difundidas es que pudo ser creado en un laboratorio, pero los expertos del organismo han catalogado esa teoría como “poco creíble”.
Los componentes de la investigación visitaron el pasado miércoles el lugar donde algunas pistas conspiranoicas apuntan que comenzó todo: el Instituto de Virología de Wuhan. Peter Ben Embarek, especialista en seguridad alimentaria y encargado de liderar el estudio, ha declarado a la agencia AFP que “si empezamos a seguir y perseguir fantasmas aquí y allá, nunca llegaremos a ninguna parte. La visita al Instituto de Virología fue un paso importante para entender de dónde vienen estas historias”.
Respecto a esas diferentes tesis, añadió que buscan “explicar por qué algunas de ellas son totalmente irracionales, por qué algunas de ellas podrían tener sentido, y por qué algunas de ellas pueden ser explicadas o no”.
El laboratorio visitado por la OMS está catalogado como de alta seguridad y puede albergar virus de cepas como el ébola. Debido a las altas medidas de control existentes, Ben Embarek descartó que la Covid-19 haya podido salir de allí y subrayó que todas esas suposiciones “serían excelentes guiones para películas y series”.
Hay que atenerse, dice el experto, a la “ciencia y a los hechos” para sacar una conclusión definitiva sobre el origen de la pandemia. Dado que está previsto que la semana que viene concluyan su misión en China, Ben Embarek recalcó que “no obtendremos respuestas completas sobre el origen del virus, pero será un buen primer paso. Será una forma muy sólida y clara de cómo avanzar”.
Pocos detalles
La Agencia EFE explica que los especialistas mantuvieron ayer entrevistas con algunos de los primeros pacientes de coronavirus en Wuhan que superaron la enfermedad, así como con familiares de fallecidos y trabajadores de comunidades especialmente afectadas.
Continúan trascendiendo muy pocos detalles de las averiguaciones de la misión internacional que, según informaron a Efe fuentes de la misma, se concentrará los próximos días en analizar los datos recogidos y elaborar su informe antes de concluir su misión la próxima semana.
Es posible que los expertos ofrezcan una rueda de prensa con sus colegas chinos sobre la investigación el próximo lunes o martes, aunque este aspecto todavía debe confirmarse, según las mismas fuentes.
El experto vietnamita en salud animal y humana Hung Nguyen-Viet, uno de los 14 científicos de la OMS presentes en Wuhan, trató esta noche de rebajar las altas expectativas puestas en la misión internacional a través de un mensaje en la red social Twitter. “Sigo diciendo que debemos ser realistas, una misión corta como esta no tendrá todas las respuestas, pero ayuda en avanzar en el entendimiento del origen del virus”, escribió.
Por su parte, el zoólogo británico Peter Daszak, afirmó que “el trabajo avanza” y esperan poder explicar los resultados “tan pronto como sea posible”. En declaraciones a la televisión Sky News, Daszak dijo que en sus visitas en la ciudad hacen muchas preguntas y han hablado con gente, por ejemplo, que recogió las muestras que dieron positivo del suelo del mercado de Huanan, donde se detectaron los primeros casos.
“China está compartiendo datos con nosotros que nadie ha visto antes. Están hablando con nosotros abiertamente sobre cada posible camino”, aseguró, aunque ha habido quejas previas por la falta de cooperación de las autoridades.
El británico ya había viajado a China hace años, donde colaboró con la viróloga Shi Zhengli, de ese instituto, en el estudio de los virus de los murciélagos de herradura en el sur del país tras la epidemia del SARS en 2003. En este sentido, destacó que debe hacerse un trabajo similar y explorar las cuevas de murciélagos meridionales de China para investigar el origen del SARS-CoV-2.
Shi, a quien también se le conoce como la “mujer murciélago” por sus años de estudio de estos animales, aisló en 2013 una cepa de coronavirus en un murciélago de herradura de la provincia de Yunnan, en el sur de China, denominado RaTG13, cuyo material genético era un 96,22 % igual al que causó la pandemia mundial, aunque ambos presentan también importantes diferencias.
La principal tesis
Rastrear la potencial transmisión animal es una de las áreas principales del trabajo de la misión de la OMS, según declararon sus miembros durante las dos semanas de cuarentena que realizaron en un hotel de Wuhan. Otra de las claves es el estudio de las primeras fases de la infección en la ciudad en lugares clave, como el mercado de Huanan, los hospitales donde se registraron los primeros contagios y los testimonios de quienes lo padecieron.
Pero algunas personas se contagiaron antes de que el virus estallase en el mercado, que funcionó como un instrumento amplificador, y esa es otra de las vías que deben explorar también los expertos para saber qué y cómo ocurrió. Además de comprobar que pasó en los laboratorios y descartar la alternativa de que pudiese haber salido de uno de ellos.
La gran mayoría de la comunidad científica internacional coincide en que lo más probable es que el virus llegase al ser humano desde la naturaleza, a través de algún animal como “huésped intermedio”. Desde que concluyeron sus 14 días de cuarentena, hace hoy una semana, los científicos internacionales han visitado los dos hospitales que detectaron los primeros casos.
El de Xinhua, donde la doctora Zhan Jixian informó el 27 de diciembre de 2019 a la dirección del centro de tres pacientes que presentaban una “neumonía con síntomas extraños” y el de Jinyintan, que también recibió algunos casos a finales de ese año.
También han acudido al mercado de Huanan, con el que estaban relacionados 27 de los primeros 41 pacientes detectados en Wuhan, que permanece cerrado desde el 1 de enero de 2020 y que ha sido desinfectado varias veces.