La multinacional Alcoa cierra dos plantas en España: 700 trabajadores a la calle
La compañía anuncia la clausura de las plantas de Avilés y A Coruña, mientras que mantendrá la producción en Lugo.
La dirección de la multinacional del aluminio Alcoa ha anunciado este miércoles a los representantes de los trabajadores en Europa el cierre de dos de las tres plantas que la compañía tiene en España. Esta medida afectará a las fábricas situadas en Avilés (Asturias) y A Coruña (Galicia) y supondrá el despido de unos 700 trabajadores. La única planta que sobrevivirá es la de Lugo, que mantendrá su producción.
La empresa ha señalado en un comunicado difundido en su web que inicia "un procedimiento de despido colectivo que afectará a todos los empleados de sus plantas de Avilés y de La Coruña, que son las menos productivas". La planta asturiana tiene 317 trabajadores y la coruñesa cuenta con 369 empleados, según los datos difundidos por Alcoa.
"Las plantas de Avilés y La Coruña se encuentran afectadas por problemas estructurales productivos y tecnológicos como su menor capacidad de producción, una tecnología menos eficiente y elevados costes fijos", ha asegurado la empresa.
La multinacional utiliza los mismos argumentos que ya usó en 2014, cuando se planteó un cierre de ambas plantas y el despido de los 800 trabajadores que sumaban entonces. Finalmente no se produjeron. La compañía alegó en aquel momento que el cierre se debía al precio de la energía, al precio de la materia prima y a unas instalaciones poco adecuadas.
La dirección de Alcoa ha convocado este miércoles a los sindicatos de las tres plantas españolas de la multinacional, las de Avilés, A Coruña y San Cibrao (Lugo), para informarles de la decisión. Fuentes sindicales aseguran que la multinacional ha dejado morir ambas plantas al no realizar inversiones.
Sorpresa en el Gobierno
La decisión del cierre de dos plantas de Alcoa le ha pillado por sorpresa al Gobierno. La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha asegurado en una entrevista en Onda Cero que los motivos alegados por la multinacional son una excusa.
"Es importante revisar con Alcoa cuáles son sus verdaderos motivos porque algo no cuadra en su decisión de cerrar las dos plantas que han tenido una buena cuenta de resultados pero han gozado de menores inversiones", ha asegurado Ribera.
La ministra ha explicado que España cuenta con una serie de ayudas, conocidas como subastas de interrumpibilidad, para que las grandes empresas de la industria electrointensiva puedan hacer frente al elevado coste de la luz. Las compañías que reciben estas ayudas se comprometen a desconectarse de la red en el caso de que sea necesario garantizar el suministro eléctrico.
Esta multinacional ha recibido 1.000 millones en los últimos 10 años para rebajar los costes de la factura de la luz. "Alcoa ha sido la principal beneficiaria en los últimos años", ha recordado Ribera.
Su compañera de gabinete, la ministra de Industria, Reyes Maroto, ha mostrado su preocupación por este anuncio y se ha puesto en contacto con los presidentes de Asturias, Javier Fernández, y de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, para trabajar conjuntamente las diferentes administraciones con el objetivo de buscar una solución. Ambos presidentes se han manifestado contrarios a los cierres.
Un grupo de trabajadores se ha concentrado frente a la fábrica de A Coruña en protesta por el cierre. La Federación de Industria, Construcción y Agro del sindicato UGT ha exigido la retirada del ERE al considerar que no existe ninguna causa que justifique un despido masivo. El sindicato cree que los motivos argumentados por Alcoa no son reales.
"Justificar en causas productivas el cierre de instalaciones en nuestro país no se ajusta a la realidad de las factorías", ha señalado UGT FICA en un comunicado enviado a los medios.