La muerte de un disidente bajo detención desata la protesta popular contra el palestino Abbas
Nizar Batat iba en una lista alternativa a las elecciones legislativas de mayo y falleció cuando era interrogado, por lo que sus allegados hablan de asesinato.
La muerte de un conocido disidente palestino, cuando estaba bajo custodia por las fuerzas de seguridad palestinas, está provocando protestas en la Cisjordania ocupada, en las que se pide la salida del presidente Mahmud Abbas y que están siendo reprimidas por la Policía.
“Vete Abbas”, gritaron en la convocatoria de ayer en la ciudad cisjordana de Ramala, una cita que terminó con heridos por la intervención de la Policía con granadas y gases lacrimógenos y motivó nuevas convocatorias por la noche con fuertes disturbios en el centro la localidad.
Nizar Banat, activista y también candidato con una lista alternativa a las elecciones legislativas de mayo que finalmente Abbas pospuso, murió este jueves cuando estaba bajo arresto e interrogatorio de las fuerzas de seguridad palestinas en lo que familia y sociedad civil describieron como un asesinato.
El representante de la Unión Europea y los jefes de misión en Jerusalén y Ramala expresaron su preocupación por esta muerte que según testigos directos se produjo cuando “más de una docena de agentes entraron en casa anoche y golpearon a Banat con porras de acero durante varios minutos antes de llevárselo”. “Conmoción y tristeza”, dice por su parte un tuit del Consulado español en Jerusalén.
Más tarde, el gobernador de Hebrón, provincia donde fue detenido, confirmó su muerte y la indignación se extendió entre gran parte de la población palestina. “Se produce en el contexto de una práctica cada vez más constante de las fuerzas de seguridad palestinas de detención y malos tratos de activistas de derechos humanos y opositores políticos que ejercen su derecho a la libertad de expresión y asociación”, denunció en un comunicado la representación de la UE.
Aumentan las detenciones
Los representantes comunitarios hicieron referencia a los informes que reflejan un aumento “de las detenciones aparentemente motivadas por motivos políticos durante los últimos meses en el territorio palestino ocupado” por Israel.
Banat, que ya había sido detenido en otras ocasiones, fue víctima de amenazas y ataques, como a principios de mayo, cuando hombres armados dispararon balas, granadas paralizantes y gases lacrimógenos contra su casa en la que se encontraban también su esposa e hijos.
El activista acusó directamente de ese ataque al partido Fatah del presidente palestino, que domina la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y las fuerzas de seguridad y, según Banat, son los únicos con acceso a gases lacrimógenos y granadas paralizantes.
Banat era un duro crítico de la ANP, que gobierna partes de la Cisjordania ocupada por Israel, y había pedido a las naciones occidentales suspendieran la ayuda al liderazgo palestinos por su creciente autoritarismo y violaciones de derechos humanos.
A principios de esta semana, las fuerzas de seguridad palestinas también detuvieron a otro destacado activista muy crítico tanto con la ANP como con Israel, Issa Amro, y lo retuvieron durante una noche después de que desatara una ola de indignación en las redes sociales.