Por qué la muerte de Isabel II es una mala noticia para la economía británica
Se trata de un fenómeno que ya se observó en Reino Unido tras la muerte de la princesa Diana.
“La reina ha muerto, viva la recesión”. Es una frase siniestra, pero la están compartiendo varios expertos en Reino Unido. El funeral de la reina Isabel II en un día festivo, tras varios días de luto nacional, podría perjudicar a la economía británica en su conjunto.
El temor a una recesión causada por las consecuencias de la muerte de la reina empieza a extenderse, como subrayó este lunes 12 el diario The Times. Según varios expertos citados por el periódico, los diez días de luto nacional, más un día festivo el lunes 19 de septiembre con motivo del funeral de la reina, podrían tener graves consecuencias económicas.
Con las empresas y los colegios cerrados ese día, además del servicio postal, el país quedará paralizado y su salud económica podría verse afectada, especialmente teniendo en cuenta las últimas tendencias, que no auguran nada bueno. La revista inglesa señala que “un nuevo descenso en el tercer trimestre significaría que la economía británica habría cumplido ya los criterios de una recesión técnica”.
Esta teoría está respaldada por Philip Shaw, economista jefe de Investec Bank, que señala que “un día festivo adicional tiende a reducir el PIB” debido al gran número de personas que no trabajan ese día. Los economistas británicos ya esperaban una recesión antes del fallecimiento de la reina, con el actual contexto inflacionista y la crisis energética como telón de fondo. Solo que no lo esperaban tan pronto.
Sin embargo, este día festivo para honrar el funeral de la reina solo tendrá un efecto relativo. De hecho, la celebración de este día “libre” para los británicos no es lo que más preocupa a los expertos. La mayor preocupación más allá del día libre son con los comportamientos imprevisibles de millones de consumidores afligidos por la muerte de la reina.
“Es posible que el impacto del día festivo en honor de la reina sea relativo. Lo que no sabemos es cómo afectará la muerte de la reina al estado de ánimo nacional y si provocará una disminución de la confianza y del gasto”, comenta Philip Shaw.
Andrew Sentance, economista y antiguo miembro del comité de política monetaria del Banco de Inglaterra, añade que esta combinación de factores podría tener “un impacto bastante significativo en la actividad económica a corto plazo”, un fenómeno que ya se observó en Reino Unido tras la muerte de la princesa Diana.
En junio se declaró un día festivo adicional por el Jubileo de Platino de la reina, pero la caída esperada y estimada del PIB en junio debido al 70º aniversario del reinado de Isabel II fue mucho menor de lo previsto (0,6% frente a la previsión del 1,3%).
Sin embargo, la preocupación está mucho más presente hoy en día. Muchos restaurantes, bares y salas de conciertos están notando un drástico aumento de las cancelaciones debido al ambiente sombrío que reina en el país tras la muerte de Isabel II.
Este artículo fue publicado originalmente en el ‘HuffPost’ Francia y ha sido traducido del francés por Daniel Templeman Sauco.