La forma correcta de poner las luces en el árbol de Navidad, según un interiorista
Llevamos toda la vida haciéndolo mal.
Seguramente desde tu más tierna infancia recuerdes una sola forma de poner las luces en el árbol de Navidad: una vez desenredados los cables (lo que ya es una odisea de por sí), se empieza desde la base y se va subiendo en espiral, tratando de apoyar el cable sobre las ramas más visibles.
Sin embargo, según un diseñador de interiores, esa no es la manera correcta de hacerlo.
En una entrevista al medio Today, Francesco Bilotto asegura que las luces de Navidad no deberían colocarse en espiral, sino en vertical.
Y tampoco hay que empezar desde abajo.
Bilotto explica que lo mejor es empezar poniendo la última bombilla del cable (del extremo que no tiene el enchufe) en la copa e ir trazando líneas verticales con el cable, con una separación de entre 7 y 10 centímetros.
"El motivo por el que me gusta hacerlo así es porque si vas en círculos, las luces tienden a esconderse dentro del árbol. Así, cada detalle del árbol, cada rama, brillará con luz propia", justificó hace un año Francesco Bilotto en declaraciones al medio HouseBeautiful.com, y añadió que con este método las luces no acabarán eclipsadas por las demás ramas.
Bilotto también aconseja colgar los adornos más resplandecientes a mayor profundidad para que las luces se reflejen en ellos y no solo brille la parte externa del árbol.
En cualquier caso, lo mejor de este método es que en enero será mucho más fácil desmontar el árbol. "Cuando lo guardes y quites las luces, será más fácil y mucho menos engorroso quitar los cables, que estarán en la parte exterior del árbol", argumenta el especialista.
Si ya has notado que Pinterest e Instagram están abarrotados de los árboles de Navidad de otras personas y tú aún no has sacado los adornos, tranquilo, estás a tiempo. Si, por el contrario, en tu casa las luces están puestas desde noviembre, tampoco pasa nada: al fin y al cabo, y según apuntan los expertos, sacar los adornos navideños pronto puede hacerte más feliz.
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Canadá y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.