La estrategia del cine para aliviar el retraso de los estrenos por el coronavirus
Compensarán que 'Sin tiempo para morir', la nueva película del agente 007 James Bond, se haga esperar hasta noviembre.
Si parecía un hito que películas como El Irlandés o Roma acabaran en Netflix sin que apenas hubiese pasado tiempo desde su estreno en los cines, los planes de Universal por el coronavirus, al menos, pueden provocar alguna que otra alegría. La productora y distribuidora ha decidido compensar la desesperación por el retraso de la llegada de sus películas a las salas, especialmente la nueva de James Bond, e incentivar a los espectadores con otra estrategia: el estreno simultáneo en cines y hogares.
NBC Universal ha aprovechado la crisis para pensar en un futuro distinto para sus títulos y aprovechar lo que puede ser un cambio de tendencia en el consumo en unos meses: ha decidido que a partir de ahora estrenará sus nuevas producciones en salas y hogares al mismo tiempo. La compañía ha anunciado que La caza, El hombre invisible y Emma, tres de las películas que tienen en salas —dado que los cines españoles han cerrado pero en otros países se mantienen algunos abiertos al público— se distribuirán en plataformas y televisión a la carta a partir de este viernes. Además, Trolls 2: Gira mundial se estrenará a la vez en los cines que sigan abiertos y en streaming el próximo 10 de abril.
“Esperamos y creemos que la gente seguirá yendo a los cines en los que estén disponibles, pero entendemos que para la gente en distintas áreas del mundo eso cada vez es menos posible”, explicaban en un comunicado
La productora y distribuidora sería la excepción a la regla, que marca dejar el plazo de 90 días entre el estreno de una película en cines hasta su llegada a televisión (sea en el soporte que sea).
La decisión podría formar parte de algo mucho más grande: el conglomerado de Comcast Universal también se estaría preparando para lanzar su propia plataforma, como lo ha hecho Disney, que competiría con Netflix, HBO, Amazon Prime Video, Movistar+ o la española Filmin.
Con los cines cerrados, Universal ha aprovechado para poner los dientes largos a sus espectadores. En Estados Unidos la taquilla ha caído más de un 60% en el último fin de semana. Ha sido la recaudación más baja desde 1994, con solo 50 millones de dólares de ganancias.
No es la única que ha tenido que aplazar por el coronavirus el estreno de taquillazos seguros como James Bond. También Disney esperará más para llevar a las salas Mulán, Los nuevos mutantes (basada en el cómic de Marvel) o Antlers: Criatura oscura. Todas estaban previstas para marzo o abril, y la única que ha puesto nueva fecha de momento es el agente 007, que no llegará hasta noviembre con su película número 25, Sin tiempo para morir.
Por su parte, Paramount Pictures también retrasará la ansiada segunda parte de la película de terror Un lugar tranquilo, mientras que Warner Bros se guardará para más tarde Pinocho, protagonizada por Roberto Benigni, y Sony hará lo propio con Peter Rabbit 2: a la fuga.
El HuffPost se ha puesto en contacto con Netflix, que de momento va a mantener todas sus fechas de estreno de catálogo, al igual que Amazon Prime Video. HBO asegura que, a corto plazo, no hay ninguna previsión que apunte a que Universal le venderá alguno de sus títulos. En el caso de esta última, hay que tener en cuenta que sus estrenos son simultáneos a los de Estados Unidos por tratarse de contenidos originales.
Los distribuidores temen que el coronavirus tenga consecuencias a largo plazo en el negocio, es decir, que acabe influyendo en el comportamiento del consumidor y que se acostumbre aún más al streaming. Eso provocaría que, cuando esta crisis pase, los espectadores abandonen definitivamente la butaca. Y Universal está poniendo el parche antes que la herida.
