La España de la pandemia: cada vez menos bebés pero menos muertes que en 2020
El INE publica los datos de 2021 hasta octubre, que marcan un 8% menos de fallecimientos que hace un año.
Menos bebés, menos muertes y un descenso en la esperanza de vida. El paisaje demográfico de la España en pandemia en 2021 revela un cambio de paradigma con respecto al pasado año, cuando el coronavirus rompió los registros y disparó la mortalidad.
Este jueves, el Instituto Nacional de Estadística ha publicado los datos pertenecientes a 2021, actualizados hasta octubre. Con la información recopilada han nacido 281.712 bebés, 8.742 menos que en el mismo periodo de 2020 y en línea con la caída visible desde hace años.
Eso sí, mes por mes hay una leve esperanza, porque en octubre de 2021 hubo 30.515 nacimientos, 253 más que en octubre de 2020. Además, supone el cuarto mes por encima de los 30.000.
Las muertes también caen, en buena medida por el mayor control de la pandemia y el efecto de las vacunas. En diez meses han fallecido 397.983 personas, un 8% menos que en ese plazo hace un año, cuando la cifra fue de 432.726. 2020 significó un giro radical a una métrica que en periodos anteriores aparecía mucho más limitada.
El contraste entre una natalidad a la baja y una mortalidad superior genera, otro año más, un crecimiento vegetativo negativo, lo que significa que España sigue perdiendo población a niveles absolutos, sin contabilizar la llegada de inmigración al país.
Datos anuales comparados hasta octubre:
La estadística a año completo
No obstante, la estadística comparada a final de año (sin contabilizar 2021) evidencia la crisis del coronavirus de forma aún más dolorosa. En todo el 2020 murieron 493.776 personas, casi un 18% más que en 2019. Esa diferencia de más de 75.000 personas a 31 de diciembre encaja con la mortalidad asociada al covid, que a esa fecha era de 74.839 personas.
Del casi medio millón de víctimas, el reparto por sexos es casi equitativo, con 249.664 hombres y 244.112 mujeres. Por edades, el grupo etario más afectado fue el de 75 a 79 años tanto en hombres (con un incremento del 25,0%) como en mujeres (22,4%).
En el caso de los nacimientos, de enero a diciembre de 2020 el dato oficial recoge 341.315 nacimientos, un 5,35% menos respecto a 2019 y un 30% menos en comparación con el 2010. El patrón de caída en bebés solo se rompió en 2014, con una ligera subida.
La esperanza de vida sufrió en 2020 una de sus mayores caídas históricas, con una quita de 1,25 años, algo que no sucedía desde la Guerra Civil. El efecto de la crisis sanitaria deja la media española en 82,33 años. Según los datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) únicamente Estados Unidos registró una caída todavía más pronunciada, de 1,6 años.
La crisis de las bodas
Los efectos de la pandemia se hacen más que evidentes en otro aspecto, la celebración de bodas, que, con los datos actualizados de 2020, cayó hasta un 1,9 por cada 100.000 habitantes. Es la tasa más baja desde 1976.
En términos absolutos se registraron 90.416 matrimonios, un 45,7% menos que en 2019, aunque la bajada se volvió radical a partir de marzo, con el confinamiento y la limitación de eventos a niveles nunca vistos en la época reciente. Por ejemplo, en abril y mayo los descensos fueron superiores al 90%: en abril solo se casaron en España 294 parejas frente a las 10.505 del año anterior, y en mayo 1.268 frente a las 16.232.
Pese al escaso número, se mantuvieron patrones pasados, como el aumento en la media de edad de los contrayentes. Así, los hombres cambian de estado civil ya en la cuarentena (40,4 años de media), mientras que las mujeres lo hacen a los 37,4. Además, de los más de 90.000 matrimonios, un 3,4% correspondió a parejas del mismo sexo.