El CNI admite el espionaje a una veintena de independentistas
Según LaSexta, Paz Esteban ha reconocido el espionaje a 18 personas.
La directora del CNI, Paz Esteban, ha acudido este jueves a la Comisión de Secretos Oficiales del Congreso con papeles. En concreto, con una veintena de autorizaciones judiciales firmadas por magistrados del Tribunal Supremo que daban luz verde al espionaje, a través del sistema Pegasus, a varios dirigentes independentistas.
La máxima responsable del servicio secreto español ha presentado durante su intervención los documentos que prueban la legalidad de las intercepciones de los móviles para demostrar que se hicieron de forma individualizada y no de forma masiva y sin autorización judicial.
En concreto, según LaSexta, 18 autorizaciones para espiar a 18 personas, cuyos nombres y apellidos habría mostrado a los diputados la propia Esteban. Estos serían los únicos espiados por el CNI, según ha explicado la directora del organismo. Entre los espiados estaría, según EFE, el actual presidente de Cataluña, Pere Aragonès.
Es decir, que no lo aportado por Esteban no abarca los 65 independentistas espiados. Según Europa Press, la directora del CNI ha apuntado a que el resto de espionajes -como el de Pedro Sánchez y Margarita Robles- tienen dos posibles “culpables”: un país extranjero, o miembros de las denominadas ‘cloacas’ del Estado.
“No ha querido hablar de Pegasus”
Según ha explicado Gabriel Rufián, portavoz de ERC en el Congreso, a la salida de la Comisión, Esteban se ha negado a hablar del sistema Pegasus. “No ha querido hablar de Pegasus, no nos ha dicho por qué”, ha asegurado el diputado.
Rufián ha dicho que Esteban ha señalado que los políticos independentistas que fueron espiados sin orden judicial lo fueron o bien por una nación o naciones extranjeras o por otros organismos del Estado. Sobre estos “otros organismos”, Rufián cree que la máxima responsable del CNI “está señalando a Interior”.
Ante los periodistas, Rufián, que asegura haber salido como había entrado porque “no ha habido secretos ni oficiales ni extraoficiales”, ha afirmado no incumplía la ley al desvelar parte de esa comparecencia porque el grueso de la misma ha versado sobre cosas ya “filtradas” a los medios de comunicación.
Sin embargo, desde la formación de ultraderecha Vox, su portavoz, Iván Espinosa de los Monteros, no ha descartado acudir a los tribunales por las palabras de Rufián.
“Han pasado breves minutos y no nos ha dado tiempo a revisar lo que se ha dicho de la comparecencia, pero no descartamos nada”, ha señalado.
En respuesta, a través de Twitter, Rufián ha contestado:
En el mismo sentido que Rufián se ha manifestado la portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, quien asegura que “las explicaciones han sido del todo insuficientes”. “Persisten muchas incógnitas. Como nos temíamos, no se ha aclarado prácticamente nada. No nos ha sorprendido. La comisión de investigación sigue siendo más necesaria que nunca”, ha reclamado.
Aizpurua asegura que “todavía hay muchas cosas por aclarar”. “Seguimos con las mismas incógnitas que teníamos a la entrada. Todas aquellas sorpresas que según la ministra de Defensa nos íbamos a encontrar en esta Comisión brillan por su ausencia. Muchas dudas, y pocas sorpresas”, ha criticado.
También ha hablado del espionaje al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a la ministra de Defensa, Margarita Robles, según ha explicado el portavoz del PSOE, Héctor Gómez, pero que “no ha pivotado” sobre este asunto la comparecencia.
El portavoz socialista ha dicho que “la información compartida ha ayudado muy mucho a esclarecer la información existente en relación al asunto de las escuchas”.
Pablo Echenique, portavoz de Unidas Podemos, ha anunciado que le han pedido al ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, “que desclasifique lo que ha enseñado la directora del CNI en la comisión”. “Eso serviría a la ciudadanía en un tema muy grave”, ha explicado Echenique.
También el diputado de la CUP, Albert Botran, ha pedido que se desclasifique la información aportada por Esteban en la reunión, así como que se permita la celebración de una comisión de investigación en el Congreso y la dimisión de Margarita Robles como ministra de Defensa porque, dice, “es la responsable última de haber ordenado o no haber evitado el espionaje de carácter político, masivo y generalizado”.
Botrán, que es uno de los que aparece como espiado en el informe de CitizenLab sobre el espionaje a los independentistas, ha lamentado no tener “ningún mecanismo garantista” de la administración española “para saber si he estado o no espiado”.
El diputado de la CUP ha criticado que “el carácter político de la tarea del CNI” sea “ilimitado y sin garantías” y ha señalado al Gobierno como responsable porque “es conocedor de todas las misiones y objetivos del CNI”. “Si no es así, que el Gobierno diga lo contrario”.
Por su parte, la portavoz del PP, Cuca Gamarra, ha asegurado que las “expectativas” de su formación están “colmadas” respecto a las explicaciones de Esteban y que no tienen “ningún género de dudas sobre el CNI” que, ha dicho, “está siendo cuestionado por todos los movimientos independentistas”.
“La información facilitada por la directora del CNI es más que suficiente, avala las actuaciones del CNI y no genera ningún tipo de duda”, ha dicho Gamarra.
Puigdemont: “España es una amenaza para la libertad”
Tras conocerse que el CNI admitía los espionajes, Carles Puigdemont, el expresidente catalán huido a Bruselas, cuya mujer y otras personas de su entorno han sido espiadas por Pegasus, según CitizenLab, ha publicado una serie de mensajes en su cuenta de Twitter en los que señala a España como una “pseudodemocracia” y una “amenaza para la libertad”.
“Queda claro que España es un estado carcomido por todos lados. Una pseudodemocracia que considera lícito tener bajo espionaje (privacidad incluida) a personas que son independentistas o que simplemente son parte de mi entorno”.
“Mi entorno ha sido infectado por Pegasus. Eso está demostrado de manera irrefutable. Sólo los terraplanistas pueden negarlo. Si el CNI ha empleado este programa, ha cometido un delito muy grave”.
“La mayoría de las personas de mi entorno no están en ninguna causa judicial, y en ningún caso entran en ninguno de los supuestos en los que un Estado puede limitar sus derechos fundamentales”.
“Han sido espiados con tal de poder espiarme a mí sin violar en apariencia mi inmunidad. Pero la han violado. España es una amenaza a la libertad; se permite espiar a mi familia y a mis colaboradores sólo porque les molesta mi libertad de acción europea”.
Cuatro horas de comparecencia
La comisión, presidida por la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha comenzado a las 9:00 horas a puerta cerrada, bajo estrictas medidas de seguridad y con una gran expectación mediática, y ha durado casi cuatro horas.
Los portavoces de los diez grupos parlamentarios han tenido que dejar sus móviles en unas taquillas bajo llave, debido al estricto secreto que deben guardar sobre los papeles que pueda mostrarle la directora del CNI, que a su llegada no ha querido hacer declaraciones a la prensa, ante las preguntas de si temía por su puesto.
Medio centenar de periodistas entre fotógrafos y redactores han aguardado a la entrada de la sala Mariana Pineda donde habitualmente se reúne la Junta de Portavoces del Congreso después de que este órgano se reúna por primera vez en dos años para que tratar información clasificada y los secretos de Estado derivados del caso Pegasus.