La decisión de Guillermo y Kate que ha causado revuelo: Felipe y Letizia hicieron algo similar
Los duques de Cambridge han sido criticados por varios dirigentes de Escocia y Gales.
Este lunes, el príncipe Guillermo y Kate Middleton iniciaron una gira en tren de más de 2.011 kilómetros por Reino Unido. La decisión, en mitad de la segunda ola del coronavirus en el país, no ha gustado nada a muchos y les ha costado numerosas críticas.
El tour de tres días de los duques de Cambridge en el que visitarán Gales, Escocia e Inglaterra, es similar al que realizaron Felipe y Letizia este verano visitando las distintas comunidades autónomas. Además, Kate y Guillermo harán uso por primera vez del tren real.
Sin embargo, su decisión no se ha visto con buenos ojos por varios dirigentes de Gales y Escocia. El ministro de Salud de Gales, Vaughan Gething, dijo el martes que preferiría “que nadie haga visitas innecesarias” y señaló que la visita de los duques de Cambridge “no debe ser una excusa para que la gente diga que no entiende lo que se les pide que hagan”.
Estas críticas se basan en que, a diferencia de cuando Letizia y Felipe iniciaron el tour por España, actualmente en Reino Unido existen limitaciones de movilidad entre los distintos territorios. Además, actualmente Reino Unido tiene una incidencia acumulada de más de 331 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días, mientras que el 23 de junio, cuando los reyes iniciaron su gira por España este dato se situaba en torno a 8,1 casos.
La ministra principal de Escocia Nicola Sturgeon también se ha mostrado disconforme con la decisión de los miembros de la familia real. “Se ha informado al gobierno escocés de su intención de venir, y nos hemos asegurado de que se conozcan las restricciones vigentes en Escocia, de modo que esto se tenga en cuenta en su decisión y en los preparativos para la visita”, ha señalado en relación a las restricciones de movilidad dentro del territorio.
Este miércoles, tras la abrumadora polémica, los duques de Cambridge finalizaron su viaje con un reencuentro familiar con la reina Isabel II en el castillo de Windsor —el primero desde el inicio de la pandemia— en el que quisieron homenajear a los trabajadores esenciales.