La cruz del Valle de los Caídos ya no será la más grande del mundo
La ciudad mexicana de Monterrey va a construir una 10 metros más alta.
En un intento de modernizar el antiguo barrio de San Luisito en el centro de Monterrey (México), el arzobispado de la capital de Nuevo León ha propuesto elevar un monumento que en su conjunto será el Memorial de la Misericordia, ha dado a conocer el arzobispo de la ciudad, Rogelio Cabrera.
La monumental cruz que proyecta medirá 160 metros de altura y 90 en la parte transversal, lo que la convierte en la más grande del mundo, superando a la monumental cruz del Valle de los Caídos en Madrid, que alcanza los 150 metros de alto.
"Le pido a Dios que yo pueda verlo terminado, pero siempre todo proyecto que se supone tarda en realizarse es urgente dar el primer paso y lo estamos haciendo comunicando a ustedes, los fieles, nuestra sana intención", ha declarado Cabrera.
"No pretendemos otra cosa que levantar un símbolo de la fe común a muchos de nosotros, los que vivimos en Nuevo León, así como también desde ese lugar animar a la solidaridad en toda nuestra Arquidiócesis".
El proyecto Distrito Independencia atenderá con mejoras en las vialidades, centros comunitarios, espacios de esparcimiento y una interconexión vial que atravesará la Loma larga con un segundo túnel para agilizar los traslados entre el municipio de San Pedro Garza García y Monterrey.
Esta obra tendrá un mirador; en la base de esta tendrá un centro comunitario y una plaza cívica. El empresariado regiomontano invertirá en el monumento que buscan se construya en un máximo de tres años. La obra iniciará estudios geológicos y de viento en el área antes de que termine la primera quincena de junio.
El polígono de la colonia Independencia, a menos de un kilómetro del centro político de la capital del estado, es uno de los conjuntos habitacionales más pauperizados e históricamente violentos del municipio, por lo que proyectos de índole municipal, estatal y de iniciativa privada buscan acondicionar este espacio para darle mayor identidad y calidad de vida a sus habitantes; sin embargo, no todos los vecinos están conformes con la intervención.