La CDU de Merkel sufre un revés histórico en dos elecciones regionales clave en Alemania
Los sondeos dan la victoria a los ecologistas en Baden-Württemberg y a los socialdemócratas en Renania-Palatinado.
La Unión Cristiano Demócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel ha sufrido un revés en las elecciones regionales de este domingo con mínimos históricos. La jornada se ha saldado con el triunfo de los Verdes en Baden-Württemberg, y del Partido Socialdemócrata (SPD) en Renania-Palatinado.
Los comicios, interpretados en clave nacional como un plebiscito de la gestión del coronavirus del gobierno de gran coalición entre la CDU y el SPD, dan al partido de la canciller sus peores resultados históricos en ambos territorios a seis meses de las elecciones federales en las que Alemania elegirá al sucesor de Merkel.
Esta es la primera cita de una serie de elecciones regionales hasta las federales de septiembre, marcadas por la ausencia de Merkel por primera vez como candidata desde 2005.
El pulso por la candidatura
El batacazo conservador era previsible por razones regionales y nacionales. Los respectivos jefes de gobierno, el verde Winfried Kretschmann y la socialdemócrata Malu Dreyer, están muy bien valorados por sus conciudadanos, como exponentes de políticos cercanos, serios y eficientes. El primero ha gobernado esta legislatura con la CDU como socio menor, mientras que la líder de Renania lo hizo con verdes y liberales.
La situación es, en cambio, extremadamente delicada para la CDU. El partido de la canciller y su hermanada Unión Socialcristiana (CSU) deben consensuar aún su candidatura para las generales. Hay un pulso interno entre el líder de la CDU, el centrista Armin Laschet, en el puesto desde enero, y el derechista Markus Söder, de la CSU.
Ambas formaciones están sacudidas por el escándalo de las comisiones que cobraron tres diputados por la compra de mascarillas anti covid o negocios con Azerbayán. Dos de ellos eran de la CDU y, el tercero, de la CSU. Los tres han dejado ya el grupo conservador.
A Söder se le atribuía cierta ventaja en el pulso por la candidatura común por su mayor popularidad. Ahora están tanto él como Laschet presionados por la mácula de la corrupción.
Es ésta una cuestión más que tóxica en un año electoral donde el tema dominante es obviamente la gestión de la pandemia. La ciudadanía está entre agotada tras cuatro meses de cierre casi total de la vida pública y decepcionada por la lentitud o desorganización de la campaña de vacunación.
La victoria de Kretschmann, de 72 años y miembro fundacional de los Verdes, da ímpetu a la formación ecologista, que tiene casi asegurado un puesto en la futura coalición alemana, sea quien sea quien la lidere.