Declaran inocente al joven supremacista acusado de matar a dos manifestantes antirracistas en EEUU
Kyle Rittenhouse ha salvado todas las acusaciones tras abrir fuego contra varios manifestantes en agosto de 2020 en Wisconsin.
El joven supremacista Kyle Rittenhouse ha sido declarado no culpable de haber matado a dos personas durante los disturbios raciales de agosto de 2020 en Wisconsin (EEUU).
Los 12 miembros del jurado, reunidos durante tres y días y medio de deliberaciones, exoneran a Rittenhouse de los cinco cargos que afrontaba, entre ellos los de homicidio intencionado en primer grado e intento de homicidio intencionado en primer grado.
En su turno, el acusado había defendido, incluso entre lágrimas, que esa noche en Kenosha (estado de Wisconsin) actuó en defensa propia cuando disparó contra tres manifestantes, dos de los cuales fallecieron. Los hechos prueban que Rittenhouse abrió fuego en medio de los enfrentamientos entre grupos de civiles armados y manifestantes del movimiento “Black Lives Matter”.
Las protestas se desataron en la ciudad después de que un agente de policía disparara por la espalda al afroamericano Jacob Blake, que quedó parapléjico. Este hecho motivó no solo manifestaciones y disturbios, sino la movilización de buena parte del deporte estadounidense.
Durante el juicio, la Fiscalía ha tratado de probar su intencionalidad, acusándole de “justiciero adolescente” por viajar con un rifle semiautomático AR-15 para unirse a otras personas armadas que se veían como guardianes de los comercios locales.
A cambio, contó con el apoyo en aquellas semanas, del entonces presidente Donald Trump, de quien era simpatizante Rittenhouse. El líder republicano, en cambio, rehusó reunirse con la familia del afroamericano Blake.
Nuevo símbolo del trumpismo
El caso contra el joven ha suscitado grandes divisiones en la sociedad estadounidense y ha instigado un debate nacional sobre el hecho de que los ciudadanos se tomen la justicia por su mano, el derecho a portar armas y la definición de defensa propia.
Tras el suceso, Rittenhouse, originario de una zona rural de Illinois, se ha convertido en un símbolo para el trumpismo, ya que muchos lo ven como un joven de bien que acudió a Kenosha para pacificar la zona y proporcionar ayuda médica, en respuesta a las protestas raciales, que a veces derivaron en altercados, en varias ciudades estadounidenses en 2020.
Tras este veredicto exculpatorio existe el temor de que estallen nuevos disturbios en Kenosha, donde el gobernador de Wisconsin, Tony Evers, activó esta semana a 500 miembros de la Guardia Nacional -un cuerpo reservista- por si hay altercados.