Kit Harington revela la verdadera razón por la que ha estado en un centro de tratamiento

Kit Harington, el que para muchos ya es Jon Snow de Juego de Tronos, decidió ingresar en un centro de tratamiento hace dos años en Connecticut (Nueva Inglaterra, Estados Unidos). Cuando lo hizo, en 2019, su representante apenas contó que el actor debía “trabajar algunos asuntos personales”. Ahora, el intérprete de 34 años ha decidido arrojar algo de luz sobre el asunto.

“Tuve problemas de salud mental durante el rodaje de Juego de Tronos y también con el final de la serie. Era algo que tenía que ver directamente con la naturaleza de la ficción y lo que estuve haciendo durante esos años”, ha revelado en el programa The Jess Cagle Show. Con ello se refiere, entre otras cosas, a la intensidad del trabajo en la producción de HBO.

Esa fue la razón de que el actor decidiera tomarse un descanso tras el desenlace de la serie, para alejarse del mundo y del “ruido”: “Me dije ‘no quiero trabajar durante un año. Quiero concentrarme en mí mismo’. Estoy muy feliz de haberlo hecho”.

La estancia en el centro le provocó ansiedad en un principio “y fue extraño”, ya que estaba aislado, sin ver a sus amigos ni a su familia. Una vez que Harington se sintió preparado para volver al trabajo, llegó la pandemia.

A pesar de ello, reconoce que ese tiempo de inactividad le ha servido para pasar más tiempo con su hijo y su mujer, Rose Leslie, otra de las actrices de Juego de Tronos.

La serie afectó a su salud, pero saca el lado positivo, haber conocido a su esposa. “Mi hijo es un resultado directo de Juego de Tronos. Además, mantengo muy buenos amigos de la ficción”, reflexionó.

Y no solo eso, sino que reconoce que rodando una escena en un glaciar en Islandia sólo pudo pensar “he conseguido el mejor trabajo del mundo”. De hecho, cuando está bajo de ánimo ‘por su suerte’, piensa en ello.